Parte 3

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Llegamos de nuestro viaje un lugar muy lindo y encantador, el frio hacia que quemara mi piel,  pero era ese frio soportable,  entramos al hotel y nos dieron el típico recorrido que se puede hacer,  puedo decir supero todo tipo de expectativa maravilloso,  me fui hacia mi habitacion y entre a bañarme, no lo soporte puedo decir que no lo soporte llore  como nunca,  como le extraño, eran muchas cosas que habian pasado y aun sigo con el mismo pensamiento que este viaje no sea el que espero, o al menos lo que esperaba.
-Quieres que hagamos un recorrido? -dijo mama dandole un sorbo a su jugo.
-Como prefieran- simule una sonrisa, me he dado cuenta que últimamente fingia bastante.
Salimos del hotel al terminar de desempacar, había comenzado a llover y el tiempo era muy loco aca,  comenzaba a gustarme,  llovia,  caia nieve,  estaba soleado y se presenciaba aun asi la humedad, pero claramente era de esas cosas en las que me podria acostumbrar.
El pueblo era chico todo al alcanze incluso el hospital,  la escuela, y los restaurantes,  pude visualizar a lo lejos una librería café,  fue emocionante estaba abierta las 24 horas.
-Genial- dije con mucho entusiasmo- esta abierto las 24 horas del dia,  crees que puedo pasar mas tarde mama?- el marido de mi mama opinó sin su consentimiento.
-Creo que no,  te puede pasar algo y eres menor para estar ahí. -mirandome como si comenzara a ganar la guerra.
-Yo creo que puede, son vacaciones,  si quieres puedes venir no creo que haya mucho problema- mi mama miró a su marido- no debes opinar tanto,  no crees?  Ella puede, es la primera vez que la veo emocionada por algo en tanto tiempo.
-No quiero que peleen- dije después de la atmosfera de tensión que se creo en el aire- además esta bien voy a hacer lo que haga falta, podemos seguir? -miré al hombre que acompañaba a mi madre que me fulmino con la mirada.
Hicimos la caminata apreciando el hermoso paisaje que habia,  mucha gente en un momento salieron de sus casas y se encontraban centradas en su camino, quizas algunas venian de su trabajo y otras quizas sean turistas,  pero sus miradas en sus caminos, siempre en sus caminos. Fuimos al hotel y encargamos comida, lo que recorrimos me causó tanto hambre era atroz,  vino un moso joven quizás tenga la misma edad que la mia, unos dos años mas, tal vez sea así.
-Que desean llevar? -nos dedicó una sonrisa a todos los integrantes de mi mesa.
- una ensalada para mi -dijo mi madre- milanesas con papas fritas para el menor y para el -señaló a su marido- costillas.
- Usted señorita? - estaba centrada en otra cosa- señorita?
- eh?
-el sonrió- que desea llevar?
- ah, lo siento,  eh canelones con salsa cuatro quesos, por favor.
-okey,  bueno ya se lo traeré, por si no me presente mi nombre es Alexander,  Esta noche lo servire.
El mozo trajo nuestra comida y me dedicaba sonrisas Que le pasaba? Mis padres se reian,  a veces era detestable, asi como pedí comida, pedi postre. Luego decidi ir a leer libros tenían una seccion que me encanto cuando llegue al hotel, mientras mis padres y mi hermanito jugaban juegos de mesa, era tanto el cansancio que sobre llevaba en mi que me dormí enseguida, habré dormido unos 20 minutos cuando sentí unas manos frías acariciando mi mejilla.
-hola, niña..
-eh?  Que paso!? -desperté sobre saltada
-el río-te quedaste dormida y se te callo el libro.
-Oh gracias-limpie las comisuras de mis labios, pude sentir que mis mejillas ardian, ¿Que me estaba pasando?.
-Oye, se que recién te conosco pero quisiera saber si te gustaria salir conmigo-ahora pude ver como se ponia colorado, ¿el mismo mozo del hotel pidiéndome salir?
-Me gustaria, conoces por aca, así que serias como mi guia turistico? -Sonreí-.
-Esta bien, quieres pedirle permiso a tus padres ¿No?, por que ¡Vamos! Todo padre no le agrada que su hija salga con un desconocido, mucho menos alguien que recien conocio por la mañana. Diablos, este chico si tenia razón.
-Esperame, viene mi mama.
-Hija te quedas aca? Yo voy a las habitaciones, estamos cansados.
-pueeeesssss... Tenia pensado- iba a decirle y Ezequiel el mozo me interrumpió.
-Queria preguntarle si me dejara salir con su hija.
Mi mamá se sorprendió, y desde luego acepto.

Frio inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora