010.

424 93 5
                                    

Si te soy sincero,

no sé cuándo empecé a enamorarme de ti.

Tal vez fue

cuando te vi ahí,

en medio de la sala,

saltándote un montón de prohibiciones impuestas por tus padres,

con una sonrisa de orgullo y gritando mi nombre.

O cuando

me pasé diecisiete horas incapaz de estarme quieto

y de dejar de repasar las canciones,

y tú cogiste mi mano,

me miraste,

sonreíste,

y dijiste que todo iba a ir bien.

O quizás

todo ocurrió cuando te vi por primera vez,

ayudando a mi hermano pequeño como una persona ayudaría a otra,

y no como una persona ayudaría a alguien que cree enfermo,

débil,

inferior.

Freely ➳ DowoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora