Esos momentos en los que te dan ganas de estar solo, intentando que la vida sea un pasado y la muerte un futuro...
No ser comprendido por nadie, que se metan contigo por tus gustos, maneras de vestir o aficiones. Que el mundo no te acepte, sintiendo que no encajas en ningún lugar, sin poder desahogarte con nada. Mantenerlo todo a dentro detrás de una falsa sonrisa hasta que todo lo reprimido sale a la luz estallando en una enorme tormenta de locura, depresión y sufrimiento. Con pocas esperanzas querer buscar una razón por la que vivir, un apoyo humano, objeto u recuerdo, si se da el caso de seguir teniendo esperanza. Soportando a los sicólogos cuales te intenten ayudar, recetándote drogas o fingiendo entenderte.
Sin embargo, por mucho que tus familiares te quieran ver vivo tú no estas hech@ para eso, no lo estás, quieres que todo se acabe, quieres olvidar todo lo malo que te ha pasado, todo. Querer revivir en un mundo menos cruel y más compasivo
No obstante hay veces que todavía queda algo por lo que si mereces vivir, y ese algo si vale la pena.