La Extraña Vida De Violetta

Uno

"Son hermosos" decían... "Deberías estar agradecida"... "Es una bendición" decían... Valla, a menos que él apodo de "moradita" me quede bien, esto no es una maldita bendición...

Oh, no me he presentado, soy Violetta Maryland, tengo 16 años y me dicen "moradita", porque? Tengo los ojos Violeta.
Los odio, no sabía que la gente le daba tanta importancia a los ojos hasta que me ví a mi misma cubierta en jugo de piña 100% sin pulpa, es una historia para otro tiempo.

Eso sera después, ya que ahora, les contaré la historia de mi extraña vida en la preparatoria, él primer lugar donde fui aceptada.

Todo comenzó la terrible mañana del primer día. Estaba en el baño después de alistar mi cabello y uniforme, colocando mis lentes de contacto al mismo tiempo que limpiaba mi falda, y... Accidentalmente derrame agua en mi lente izquierdo... No podía usarlo así y tenía que esperar a que secara, así que, use lentes obscuros, si, en él primer día.

Como si no fuera suficiente él verme como una hipster emo en mi primer día, mis jugos de cajita favoritos se habían acabado, y solo quedaban dos de los sabores que mas detesto, piña y uva...
Tome él de uva y me apure a llegar, solo para descubrir ahí que mi primer maestro no había llegado.

Me pare en la entrada y espere pacientemente al tiempo en él que bebía mi jugo de uva, de repente, un chico alto lanzó una pelota de fútbol en mi dirección, golpeándome (LOGICA) directo en la frente, él impacto fue tan duro que fui empujada hacia atrás en caída, pero, había unos brazos delgados para detenerme, "ANIME SHOUJO SI!!!" pensé, pero en realidad él dijo.
-cuidado, él balón se va a desinflar- termino su oración, me empujo para reincorporarme y se fue.

Comencé a pensar en como él era un idiota hasta que note que mi jugo no estaba en mi mano, ni debajo de ella.
-creo que esto es tuyo- escuche a una voz masculina pero suave detrás de mi- espero no te importe que mi suéter haya tomado un poco.
Me di la vuelta para encontrar a un increíblemente lindo chico, su flequillo fue lo primero que noté, era tan perfecto que bien y podría ser un modelo, su cara era hermosa, nunca había visto a alguien tan perfecto, no era su cabello negro, ni sus ojos azul cielo ,ni su voz masculina pero suave y dulce, ni que le quedara tan bien él uniforme (no lo puedo negar) , era la mezcla de todo eso lo qué lo hacía tan atractivo
-uh... Lo siento mucho- dije, pero me interrumpio
-es algo muy tarde para eso, ahora vas a lavar mi sueter
Me sonrojó su comentario, pero me di cuenta de lo idiota que estaba siendo este chico.
-lavalo tu, no es como si fuera mi culpa-dije mientras cubría mi pecho y cara con mis brazos para no mostrar que estaba roja como un tomate, pero, él tomo un paso adelante y se acerco a mi, una mano de distancia, bueno, su cara al menos.
-pero esto definitivamente es tuyo, o acaso no sabes lavar-dijo con una estúpida pero hermosa sonrisa burlona mientras tenia su dedo índice en mi codo, separe y baje mis brazos violentamente.
-pero que tontería, claro que sé...-no pude terminar, inmediatamente tomó mi mano.
-en ese caso, ven conmigo.
Me condujo al baño de la escuela, donde me dio su suéter en la entrada.
-apurate, no pueden verme contigo.
Estaba justo a punto de contestar cuando unos chicos se dirigieron en nuestra dirección y él me empujo dentro del baño y entro conmigo.
Él baño era pequeño, con trabajo cabíamos los 2, hizo un sonido de "sh" y apuntó a un lavabo detrás de mi.
Nunca había lavado ropa, pero él me observaba, dejenme dar contexto, había lavabos en dos lados del baño, yo lavaba en uno, y él me observaba sentado en él otro.
Cuando termine se lo entregue, estaba muy orgullosa pero...
-es una broma?-dijo, con una expresión molesta, al parecer era peor de lo que esperaba.
-lo que sea, lo usare así, no gracias.
"Idiota egocéntrico" pensé.
-oye y... Una pregunta, eres ciega?-dijo sarcásticamente
-que? Claro que no, alguien me lanzo ese balón, no es como si quisiera mancharte...
-me refiero a los lentes, perdedora
-es mejor no explicar-dije con desdén-adiós
Camine lo mas rápido posible a mi segunda clase, la primera era orientación, esta, era donde conocería a mis compañeros de los siguientes años, era emocionante.
Llegue a la puerta y vi una sombra a mi lado, mas alta, mucho, al voltear me di cuenta, era ese chico de nuevo...