Imagina que vas por un camino y al poco este se divide, y luego otra vez, y luego otra y otra. Así hasta que la multiplicación es tan complicada que la dejamos. ¿Como hacemos para volver a la decisión original? ¿Es realmente posible? Si decidimos creer en algo, ¿ hay algún lugar en donde podemos decidir no creer? ¿Se da marcha atrás o se empieza de nuevo? ¿Cuál es la constante de nuestras vidas? Las voces no cambian, mis manos o el color de mis ojos. ¿Por que algo tan poderoso como los pensamientos sí lo hacen? ¿Por que la vida se vuelve un eco de elecciones? ¿Quien tiene una vida propia y quien sencillamente deja que las cosas fluyan?
Si hay un por qué en todas nuestras decisiones, entonces no existen los errores. No existen los accidentes.
Vamos de una a otra vida por que somos un constante cambio. Vamos y nos reencontramos. Dejamos y conservamos. No hay forma de decidir tarde o temprano, todo aquello que te definirá. La vida nos obliga a decidir.
Lo único permanente es el cambio: de nuestros afectos, de nuestros sentimientos y de lo que hacemos cada día.
"Es posible imaginar y concebir un universo mucho mejor que este en el que estamos obligados a vivir"