Estaba exhausta, necesitaba alguien que me trasmitiera algo de cuidado; sin pensarlo llame a Len para que me ayudase a recuperarme, el cargaba su traje de siempre, su peinado, camisa y pantalón que siempre usaba. Yo sólo tenía una camisa que me llegaba un poco arriba de las rodillas sin nada abajo, también tenía el pelo suelto y con algunos ganchos, como estaba medio dormida hablaba sin anticipar.
-Len...¿Mi ropa interior donde está...?-Dije pasando mi mano por mi ojo derecho, en verdad estaba cansada.-¿No la tienes tú?-Susurre entre bostezos bajándole el pantalón para ver si tenía puesta mi ropa interior.
-¡No Rin!¡No la tengo!-Exclamó el chico tapándose y a la vez sonrojado-Busca bien...-Dijo molesto
-Bueno....-Dije desanimada-Ven...Quiero bañarme, estoy muy cansada para hacerlo sola......-Susurré dirigiéndome al baño.
-¿¡Qué?!¿¡Cómo que me bañe contigo?!-Exclamó molesto y sonrojado-Ah....¡Esta bien!-Dijo cruzándose de brazos y también dirigiéndose al baño.
Abrí el choro de la tina con una temperatura tibia, me desnudaba mientras que Len se tapaba la cara para no verme. Luego vi que tenía una ereccion.
-Len.....¿No tienes un problema?-Susurré entrando a la ducha
-¡Eh!N-no...e-es-Dijo nervioso y tapándose.
-Esta bien....Ayúdame a bañarme Len-Dije agotada recostándome en la tina y entregándole un jabón-Quítate la ropa y restriega me el jabón en la espalda.
-¿¡Qué?!Solo me quitaré la camisa y los pantalones-Dijo abriéndose los ojos como platos y quitándose la ropa.
-Esta bien....Pero después te los quitas.-Dije mostrándole mi espalda-Me avisas cuando termines-Dijo durmiéndose.
Sentí que paró y me desperté y vi que no estaba en el baño, hací que salí completamente desnuda a buscarlo.
-Len.....-Dije cerrando el grifo-¿Donde estás?
Lo vi escondido es su cuarto dentro del closet.
-Sal de ahí Len...-Susurré tratando de abrir la puerta hasta que lo logré-Len....
De eso me tiro a la cama sin decir nada.
-Lo siento Rin...Pero me obligaste-Dijo quitándose la ropa-
De eso mi cerebro despierta, estaba cansada pero consiente.
-¡Ah!¿¡Por qué estoy desnuda!?-Dije tapándome-¡Len!¿¡Qué piensas hacerme?!
No dijo nada solo me empezó a lamer mi vientre, hasta subir y llegar a mi pecho izquierdo. Con suavidad lo agarró y lo empezó a lamer en círculos causando que gimiera suavemente.
-D-detente Len-Jadeé.
-......-Solo suspiro y empezó a chuparlo sin ritmo, aveces fuerte, suave o entre los dos.
-N-no quiero esto-Dije triste y confundida, no entendía porque me estaba haciendo esto.
Empezó a lamer todo mi cuerpo, primero los pechos, el vientre hasta que sus lamidas llegaron a mi intimidad, de ahí alejó su lengua y con su dedo índice empezó a a subirlo y bajarlo con fuerza pero sin brusquedad.
-¡Ah!-Gemí fuerte tratando de no hacerlo, eso solo lo emocionó. Mantuvo su movimiento pero esta vez era muy brusco y abusivo. Se aburrió y metió su dedo.
Torcía mis piernas de el dolor que pasaba, tenía mi pulso acelerado y mi temperatura subió.
Sacó sus dedos y los lamió, como le gusto empezó a lamer mi intimidad agarrando mi cíclotis y jalándolo.-Esto es solo el principio-Dijo con un tono pícaro. Ahora más diversión -De eso entra en mi con suaves y delicados movimientos provocando que gimiera y lo hiciera más fuerte.
Me paró colocando mi torso inclinado hacia adelante y aumentando de velocidad.
Con sus manos pellizcaba mis tetillas para que gimiera y aumentará de velocidad.-D-detente-Susurre entre gemidos.
La habitación ya estaba llena de gemidos, jadeos y suspiros, el ambiente era tenso y caliente.
Sentí que Len paró, me había llenado completamente de semen, haciendo que le diera un orgasmo y se recostara en la cama. Pero todavía no había terminado.
Empezó agarrar vos sus manos mis dos tetillas, pellizcando las y frotándolas, muy fuerte. Las torcía y las jalaba haciendo que lactara; empezó a lamer mis tetillas y la leche que derramaba.
Me sentía indefensa.
Su mano derecho bajó por mi intimidad jalando nueva mente mi cíclotis. Su mano izquierda también bajo y me puso al revés, que mi intimidad pegara con su cara.
Empezó a lamer, no le importaba si tenía semen y tampoco si me dolía, solo gemía y jadeaba.
Aumento de intensidad y empezó a improvisar, su rostro ya no era de Len, si no de un loco pervertido.
Mordió mi cíclotis haciendo de que estaba vez no gimiera, si no llorara.
Con sus manos abrió mis labios vaginales para ver mi interior y lamer, su lengua ya estaba muy profunda.Luego me coloco en posision perrito y entro en mi por mi ano.Hací duramos por unos 25 minutos hasta que len se durmió y pude escapar.