La verdadera realidad del amor

el comienzo

La bendita alarma me saco del sueño hermoso que nadaba en mi subconsciente. Soñar con que él, con su sonrisa y q yo fuera el motivo...con eso me bastaba para morir en paz.

-- linda baja rápido llegarás tarde a la escuela - grito mamá desde la cocina, apostaría un ovario a que estaba preparando la merienda que llevo al colegio.

Me levante, con cara de pocos amigos, amo dormir y el sueño me ama a mi .me duche y vestí rápido me hice dos trenzas y me quedé viendo en el espejo; cabello lacio largo, tez morena, ojos marrones, algo chaparra, no tenía nada especial, nada que pudiera atraer le a él. Escondí mi cuerpo con tres camisetas y un pantalón holgado.

Me sentía prisionera, con esta vestimenta, pero papa me golpearía si mirará un poco de mi piel descubierta. Bueno el busca cualquier motivo para golpearme, sus golpes ya no son una novedad en mi....me da escalofrio en pensar cuantas veces desperté en el hospital, cuantas veces no fui a la escuela porque no podía ni caminar de los magullones.

Con el paso de los años, entendí que lo único que sentía por mi papa era miedo, un miedo alarmante.

Tantas golpizas que ya solo me queda catalogarlas por nivel de daños ocasionados.

Puedo recordar la primera fiesta a la que iba a asistir, Brenda me presto un vestido azul marino de ceda, marcaba cada curva de mi cuerpo, en la parte superior tenia corte de corazón, mis senos jamás se habían visto tan bonitos, el vestido terminaba un centímetro arriba de mi rodilla, por un momento me sentí hermosa, y lo único que deseaba era q el me viera, que el supiera que existo.....papá me saco de mi fantasía con una bofetada.

- te miras como una puta barata, me descuido un minuto y te corrompes- dijo mientras me jalaba del cabello

- papá el vestido no es vulgar, y yo sé que me miró bonita...pero no me miró como prostituta! - conteste mientras una lágrima llegaba a mis labios...le levante la voz....en ese momento supe que mi sueño de que el supiera de mi existencia no se cumpliría

- y ahora me contestas, maldita perra. cada día te pareces más a tu madre, pero AQUIE ESTY YO PARA ENSEÑARLES A COMPORTARSE- me soltó un puñetazo en el ojo- pero ahorita te enseñaré que no debes pasarte zorra, mi hija no se convertirá en la nueva prepago de la ciudad- dijo mientras se sacaba su cinturón.

-no papá, por favor, no te falte el respeto...solo quiero sentirme bonita...- no termine la frase porque su puño calló mi grito.

- puta- gritaba mientras me daba cada golpe...y todo por querer verme bonita....no iba a dejar q esto siguiera así, hice un esfuerzo y logre zafarme, y llegué a la puerta.

- mamá! Mamá! Auxilio, sácame de aquí, para me matara!- grité con angustia.

Él estaba ahí de pie recuperando el aliento, sabía que aquí no terminaría todo.. y no me equivoque.

- solo calla y deja que el haga lo que tenga que hacer... solo recuerda que es por tu bien- respondió mamá de una manera tan fría que me dolió más que cualquier golpe recibido, esa era su actitud cada ves que papa me pegaba. Se supone que ella me tenía que proteger como su vida, esa esa es la obligación de toda madre. Pero ella segada por el amor y por el miedo, solo se resignó a escuchar mis gritos y sollozos.

Me deslice lentamente hasta el suelo, las lágrimas que en ese momento caian de mi rostro era porque me sentí tan desprotegida. y el siguió golpeando me. Llego un momento en que todo se puso negro y deje de sentir dolor.

Cuando desperté, me encontraba en el hospital, con una pierna y tres costillas fracturadas, mi cara deformada por tanto moretones, esa vez si llego demasiado lejos. Ese día perdí cualquier grado de autoestima, Y me encerré en mi dolor.

Mamá no estaba en el hospital, seguramente cuando el se dio cuenta q yo aún vivía, le prohibió seguir a mi lado, porque comenzarían a hacerle preguntas y él siempre tenía miedo de que mama dijera lo que paso.

Ese día perdí más que mi meta de que lían me viera, ese día perdí mi capacidad de amarme.

Y ahora, hace más de un año que sucedió esto, y ahí estaba yo, vistiendo como monja para no despertar su furia, y no ir esa semana con otro moretón en el ojo.

-luz baja ahora o tendrás problemas- grito el

eso fue suficiente para q yo saliera corriendo.