Eran las 2 de la mañana en Paris.
Los ciudadanos descansaban sobre sus camas, a excepción de una chica de cabellos azabache y ojos tan azules como el cielo, quien miraba desde su ventana la lluvia con melancolía, recordando aquel día que ni su mente, ni su corazón, ni ella era capaz de olvidar aquel día en el que se enamoro bajo la fría lluvia, sin embargo, estaba protegida por la sombrilla de el chico de ojos color esmeralda y cabellos dorados, Adrien.
La calidez de de su amabilidad le había hecho olvidar el frió que antes había estado sintiendo, su atrayente mirada le hizo olvidarse, al menos por un momento de las responsabilidades de heroína que tendría de ahora en mas, no solo se olvido de eso, también le hizo olvidar que todo lo demás, solo existían ella y el. Solo un trueno fue capaz de despertarla de su trance y así poder reaccionar y tomar finalmente el paraguas que aquel chico le había estado ofreciendo, y por un corto momento, pudo sentir la calidez de su tacto. Pero aun así, ninguno de los dos había podido apartar la mirada, se sintió tan tonta en ese momento por haberlo odiado por un hecho que ella había malinterpretado.
Pero por estar tan hundida en sus pensamientos accidentalmente el paraguas se cerro sobre su cabeza dejando todo a oscuras para sus ojos.
Al rubio le tomo unos segundos para reaccionar para luego reírse a carcajadas de la situación que le había causado gracia, la azabache se encogió un poco mientras que lograba abrir el paraguas para observarlo maravillada, su risa le había fascinado tanto que la había contagiado que no pudo evitar soltar una pequeña, linda y dulce risa.
Adrien paro de reír y le dedico una sonrisa dibujada a la azabache.
—¡Nos vemos mañana entonces!—Se despidió mientras que se daba la vuelta y comenzaba a marcharse dejándola atrás.
Marinette se quedo sin habla por unos segundos viendo como se iba, hasta que reacciono y se puso recta.
—Si, nos vemos... Nos vemos mañana, bueno no, hasta mañana, quiero decir... —Cuando se dio cuenta de que estaba balbuceando sacudió la cabeza y aparto su mirada de el—. ¿Por que estoy tartamudeando?—Susurro.
Al escuchar eso, Tikki salio de su escondite y voló hasta la altura de los ojos de Marinette y con una sonrisa y un tono tierno y burlón le dijo:
—¡Tengo una pequeña idea de por que!
—¿¡Eh?!—La azabache se encogió apartando la cabeza avergonzada mientras que Tikki se apego a su mejilla para darle un abrazo, Marinette le dedico una sonrisa dibujada ante esa acción, Tikki tenia razón, ella también se hacia una idea, se había enamorado del chico nuevo, Adrien.
Un trueno la hizo sobresaltar y así despertarse de sus recuerdos, observo la lluvia nuevamente y suspiro mientras que en su cabeza se repetían las preguntas:
''¿Piensas en mi?''
''¿Que soy yo para ti?''
Suspiro nuevamente, el tiempo pasaba y el no la notaba, pero no pensaba rendirse, tenia decidido algún día poder retirar su mascara y así el al fin lo sabrá.
Por alguna razón sonrió y volvió a su cama dispuesta a dormir no sin antes que el rostro de Adrien pasara por su mente.
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En la lluvia.
Short StoryRecuerdos de como se enamoro del chico de ojos color esmeralda bajo la fría lluvia donde lo único que la abrigaba era la calidez de su mirada. Créditos a la imagen de la portada: terriblenerd.tumblr.com