Summer Love

Capítulo 1

Un nuevo día, una nueva semana, un nuevo mes, nuevas vacaciones y una nueva vida. El sonido de los pasos de mi madre de un lado hacia otro me despertaron a las 6 de la mañana, y la verdad, es que esa noche no había conseguido conciliar el sueño.

-Harry: Hermanita, despierta, venga, ¡que nos vamos a Londres!

Me hice la dormida, me encantaba cuando Harry se ponía nervioso cuando no lograba despertarme.

-Harry: ___, se que estás despierta, ya no voy a caer en ese juego.

-___: Mierda... ¿ya no cuela?

-Mi querida hermanita, son casi 17 años con la misma broma.-dijo besando mi mejilla.

Tenía muchas ganas de mudarme a Londres, pero no me hacía mucha gracia la idea de alejarme de mi madre, ya que a mi padre a penas le conocía, y tener que vivir sola en pleno centro de Londres...

-Mamá: ¡___! ¡Harry! ¡a desayunar! ¡llegáis tarde!

-___: ¿QUÉ? ¡ME TENGO QUE DUCHAR Y ARREGLARME!

-Harry: Date prisa.

Me duché lo más rápido que pude, cosa que me estresaba mucho, me peiné dejándome el pelo suelto, me maquillé, pero no en exceso, y me vestí con esto: http://www.polyvore.com/cgi/set?id=87485505&.locale=es

Bajé y allí estaba mi madre con una cara que no me gustó mucho y mi hermano desayunando.

-Harry: Wow, ¿vas a ligar con alguien?-esto lo dijo mirándome de arriba a abajo.

-___: Cuida tus ojos hermanito. Menos mal que voy a vivir sola, sin tí hasta yo no se cuando.

-Harry: Cuanto amor eh... ¿y quién dijo que ibas a vivir sola?

-___: ¿Cómo?

-Mamá: Vas a vivir con una chica llamada Caitlin, es la hermana de un amigo que tiene Harry en Londres.

-___: Bueno, tampoco me desagradará, creo. Mamá, no tengo hambre, no voy a comer.

-Harry: ___... no empecemos por favor...-dijo echándome una mirada llena de furia. Llevaba varios días sin comer, mi madre me decía varias veces que tenía problemas alimenticios, pero la verdad, yo no creía eso, solo que no estaba a gusto con mi cuerpo...

-Mamá: Vas a comer algo, ___, son varias horas de viaje, come aunque sea un poco...

-___: Está bien...-dicho esto, desayuné un bol de cereales, con poca gana, y nos montamos en el coche, despidiéndome de la que había sido mi casa durante casi 17 años...