problem.

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nick estaciona su auto en frente de mi casa.
"bien, entonces mañana temprano te paso a buscar, ¿quieres que toque la bocina?" pregunta casual. el sol brillaba esa tarde y era extremadamente raro en esta ciudad. o al menos en esta época del año.
"quiero mi moto de vuelta"
"al parecer estará en el taller por unas semanas, así que te seguiré llevando"
"como sea" rodé los ojos "te quiero mañana temprano aquí, la misma hora de hoy, sin bocina" agarré mi mochila y me dispuse a salir dejando al castaño en el auto, que me seguía con la mirada, sonriendo.
él se fue a casa, yo entré a la mía. gloria estaba preparando un postre de frutas, de esos que eran los favoritos de mi padre y silvana limpiaba la casa. me vieron llegar, lo que significa que siendo las cuatro de la tarde, ellas se irían a casa. rápidamente y dejando todo en orden se acercaron a mí con una sonrisa, despidiéndose.
la pequeña silvana fue la primera en dejar la casa, y gloria me miraba como sabiendo lo que pasaba por mi mente. no quiero que se vayan ya.
a veces me gustaría regresar al tiempo que estaba mi mamá acá y todo era música y felicidad. las chicas estaban en casa todo el día y hacíamos un pastel de estos cada mes en el día de su aniversario.
"todo estará bien, mi niña" susurra gloria en mi oreja, y luego de un abrazo sale de la casa.
volteo al ver que gloria había dejado dos pedazos de ese pastel ya servidos, y el más grande supuse que era el de mi padre.
agarré el plato y subí las escaleras con grandes zancadas hasta llegar a su cuarto, la puerta de madera oscura tan alta, a la que no se me permitía la entrada en años. la única que podía entrar ahí, además de mi padre, era gloria.
toqué la puerta y el eco no se hizo esperar, y mi padre salió y cerró la puerta detrás de él.
"buenas tardes, papá, gloria hizo el pastel de frutas que..."
"sólo dame el plato, estúpida, ya sé que lo preparó" espetó brusco.
"lo siento, yo sólo, iré a casa de los cox" volteé dispuesta a irme, pero su mano jaló mi brazo toscamente y me hizo girar a mirarlo.
"¿ah sí? ¿a casa de los cox? seguramente quieres ir a revolcarte con ese mocoso que te trajo ahora, puta"
"no es así, él solo me trajo" traté de soltarme de su agarre y de explicarle, pero como de costumbre no me escuchó.
"tú tienes tu motocicleta, no necesitas que te traiga un tío que ni siquiera lo conozco"
"eso quería decirte, mi moto está en el taller porque tuvo un accidente"
"¡no me mientas!" gritó y con su mano libre me bofeteó. "estas perfecta, ¡no has tenido ningún accidente!"
"no, yo no, sólo arrollaron ..."
"¡cállate de una maldita vez!" su agarre se hizo más tosco, como si fuera posible, y me dio un latigazo con lo que parecía ser una correa con una gran hebilla.
lo volvió a hacer. una y otra vez.
me golpeó en las piernas, costillas y en el abdomen. corrí hacia mi cuarto mientras las lágrimas cubrían mi rostro, y como pude cerré la puerta. agarré mis cosas y me trepé por la ventana como lo hacía en este tipo de ocaciones y salí, a donde encuentro a mi razón para seguir viviendo.

troublemaker. || nick robinson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora