LA SOLEDAD Y DESEPCIONES DE UN JOVEN CRISTIANO

LA SOLEDAD Y DESEPCION DE UN JÓVEN CRISTIANO

CAPÍTULO I

CÓMO FÁCILMENTE PERDEMOS LA VISIÓN QUE DIOS TIENE PARA NOSOTROS...

Nosotros los jovenes solemos enredarnos en los placeres del mundo olvidándonos de la visión que ya Dios ha escrito para nuestras vidas.
Solemos enredarnos fácilmente en malos pasos que corrompen nuestro corazón, nuestra mente, nuestro cuerpo y a nuestra alma. Por eso los jovenes somos presa fácil para caer y perder fácilmente la vision de lo que Dios ya ha predeterminado para nosotros. Por eso debemos de estar alerta contra cualquier cosa que nos quiera mover y apagar nuestra fe. Porque en la Juventud esta la fuerza que se necesita para levantar a un país o a una nación. Por eso debemos de cerrar toda brecha o puerta que hemos abierto conciente o inconcientemente. Esto no solo aplica a los creyentes sino que tambien implica a todo aquel que quiera ser parte de la visión de Dios para el país o para la nación.
Nosotros los jovenes no debemos de permitir que nos apaguen la visión porque como podremos crear un mejor futuro para nosotros y para nuestras futuras generaciones si lo unico que hacemos es quejarnos y decir que no podemos lograr nada. Pero es todo lo contrario si nos sometemos a la voluntad de Dios veremos como poco a poco surjiran los cambios pero debemos de poner de nuestra parte y dejar que Dios sea quien nos muestre la visión que el tiene para cada uno de nosotros.
Debemos motivarnos para poder cambiar la visión errónea que nosotros mismos hemos creado para poder crear una nueva visión para nuestras futuras generaciones.
Gran parte de como fácilmente perdemos la vision es cuando dejamos a un lado a Dios aun siendo creyentes y eso nos aturde y nos perdemos en nuestros propios actos. Y dudamos de la existencia de Dios. Por eso debemos de tener cuidado con perder la visión de Dios en nuestras vidas y para que hemos sido creados.