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Miriam

-¿Que tal con Julesito?- me pregunta mi amiga subiendo y bajando las cejas.

-Pues... bien, Jules no me quiso dejar sola por que decia de que podria venir un "lunatico" y secuestrarme.

-¿Eso te dijo?- ella abre los ojos como platos- awww, haceis una buenisima pareja.

-Pero, ¿que dices? Me conoce desde hace menos de un dia, no se enamorara de mi, volvera con Camille o se ira con otra, es guapo, esta bueno y tiene dinero, cualquier chica a sus pies- explico.

-Illa- tan andaluza como siempre- de ilusiones se viven, fijate que Nico me ha dicho que Jules no paraba de mirarte.

-No seria a mi... Bueno, venga a dormir que es tarde. Mañana me cuentas tu cita con Nico.

-Jajaja, valee, hasta mañanaa.

Ambas nos dormimos, y yo pensando en Jules y el sentimiento que me tiene descolocada con respecto a él.

Al dia siguiente

Me despierto por la alarma, las 8 de la mañana. Nat sigue dormida, asi que la tengo que despertar.

-Natalia- la sacudo- despierta, las firmas empiezan a partir de las 10 y media- no se despierta- NATALIA FERREIRA RESURRECCIÓN, DESPIERTA- ni gritandole- Natalia, esta aqui Nico en la puerta.

Ella se levanta de la cama rapidamente.

-¿Que? Nico no te vayas, estoy despierta- grita corriendo hacia la puerta.

Yo me parto de risa, que velocidad, ni el coche de Nico corre asi.

-Seras cabrona, me has asustado- dice haciendo un mohín.

-Lo siento- me sigo riendo- pero es que no despertabas, asi que te has enamorado de Hülkenberg ehh, tendras que aprender alemán por tus suegros- rio fuertemente.

-Muy graciosa, ¿te pregunto por Jules?- paro de reir bruscamente.

-Bueno... creo que llevo enamorada de él desde hace tiempo.

-Lo se, tienes toda la libreta llena de su nombre, estas muy pendiente de él, tienes millones de fotos suyas...- enumera.

-No, pero no como un idolo- ella se sorprende- sino, como algo mas.

Jules

Me levanto pesadamente de la cama, pero bueno, hoy es el día de la firma y la voy a volver a ver. ¿Le doy mi numero? Parece de fiar, la verdad.

Me preparo, me pongo la camiseta de Marussia, los pantalones y voy al circuito. Llego al box, mi fisio Andrea Ferrari, está allí.

-Hola.

-Holaa, ¿te sabes el horario de esta mañana?

-Que si pesado, me lo recordaste ayer mil quinientas veces.

Reímos a carcajadas, estoy muy nervioso por volver a verla.

-Vale vale, en 5 minutos tienes que estar en la firma.

Llego allí y está ya Max.

-Hey tío, ¿qué tal ayer?

-Bien, estuve en su habitación.

-¿Haciendo el qué?- insiste picaramente subiendo y bajando las cejas.

-Yo no soy ese tipo de persona que se lleva a la cama en nada de tiempo.

-Jules, escucha. Estás más amargado que la Señorita Rottemeier de Heidi, tú la necesitas y ella te desea, es simple.

-Qué pesadito te pones, lo he pillado.

Todo de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora