Skype. ™

Tan especial...

Ya empieza anochecer voy a dormir y no dejo de pensar en ti, mientras miro la ventana. No dejo de pensar en esta tarde tan mágica, tan especial, tan única. Jamás me habia sentido así de bien y de especial. Jamás nadie me habia mirado con esos ojitos, cuando yo estaba encima de esa barandilla y tu frente de mi, rodeados por esos árboles sobre el pequeño puentecito que cruzaba el rio, tus ojos transparentes, lagrimosos, puros, en los que me podia ver reflejada, los que tras cada parpadeada me decian "te amo".
Pero al mismo tiempo, sin querer, los dos nos mirábamos con pena, con añoro, con miedo... Los dos nos mirábamos sabiendo que dentro de poco nos separariamos y por un tiempo muy largo. No dejaba de pensar en ello, me provocaba demasiada tristeza, demasiado apuro no tenerte para mí y disfrutarte cada dia.
Seguir andando mientras asombrada sigo recorriendo como una niña pequeña cada parte de su rostro, voy andando haciendo el tonto, simplemente feliz. Nada me hace dejar de sonreir. Me doy la vuelta y le veo ahi esta, si ahi esta conmigo a mi lado. -De verdad, que no puedo soltarte mi amor, no puedo dejarte ir, no me sueltes jamás!- le exclamé.
-Jamás!- dijo él, otra vez con los ojos derramando xispas y felicidad.
Algo especial me transmite cada vez que le miro, algo que no se lo que es, pero me da todo lo que necesito, todo aquello que me hace sentir demasiado afortunada.
Sin creerlo, no podia creer que este dia acabará ya, ¿porque? odio que los mejores momentos pasen tan rápido. Me despedi de ti, como si mañana no puediera volver a verte, como si no hubiera un mañana. Todo y habiéndolo.
Sabia que dormiria en un hotel esos dos dias.
Entra mi madre en la habitación para ver ya duermo, lo cierto es que no, sigo pensando en ti, pero moriria de ganas de seguir contigo de estar en esa cama del hotel, seguir abrazandote y quedarme dormida mientras me acaricias. Lo deseo demasiado.