(Aquí tienen la imagen de la portada a mejor resolucion(?))
(Disfruten la lectura!)
Marinette observó a Adrien entrar en su limusina y frunció el ceño.
-Lo estas volviendo a hacer, Mari, basta - comentó Alya, codeandole.
La nombrada le miró y sonrió desanimada, luego bajo la mirada al suelo. Se frotó las manos y soltó un suspiro.
-Lo siento.
La castaña le sonrió y le tomó del brazo, Marinette levanto la vista.
-Vamos, hay una nueva heladeria que han abierto y me muero de ganas por probar sus helados. Yo invito.
-No, gracias, la verdad es que ultimamente no tengo muchas ganas de hacer absolutamente nada -respondió.
Alya jaló del brazo a Marinette, provocando que torpemente se tropezara sobre ella, lo cual su amiga aprovecho apra rodearle con sus brazos. Sin dudas era la forma mas rara de abrazar a alguien, pero la peliazul agradecia el gesto.
Regreso el abrazo con desgano, ocultando su cara en el cuello de su amiga y sintiendo una repentina ola de tristeza.
-Sabes que puedes contarme lo que sea, ¿no? - susurró Alya, palmeando la espalda de su amiga. Marinette asintió.
-Tengo que...aclarar algunas cosas conmigo misma.
-Tan pronto como lo hagas no dudes en venir a mi - respondió la castaña, separandose de su abrazo.
-Lo haré.
Ambas se despidieron, Alya encontrandose con Nino en el camino y preguntandole a él para acompañarla a la nueva heladeria, y Marinette caminando hacia cualquier lugar excepto su casa.
Pensó que tal vez podria dar una vuelta por el parque que estaba al lado de su casa, o ir al museo, o incluso ir a ver la torre Eifel, pero nada le convencía. Necesitaba estar distraida, necesitaba cualquier cosa que no le hiciera pensar en Adrien.
Chocó contra alguien de casualidad y pidió disculpas inmediatamente. Levantó la vista y se topó con Yuleka, quien le miraba indiferente y a un lado estaba Rose, quien le sonreía timidamente.
-No hay problema - respondió Yuleka, su expresión cambiando a una mas suave. - Ten un poco de cuidado.
Marinette asintió, sintiendose un poco avergonzada. Rose sintió la incomodidad de la peliazul y se despidió rapidamente, empujando a Yuleka para que se retirase de igual forma. La de pelo morado se detuvo un momento.
-Si tienes tiempo libre, ¿te gustaria servir de modelo para Nathaniel? -preguntó.
-Uh, ¿Modelo de que?
Rose le sonrió y le dijo: -Esta planeando entrar a un concurso de dibujo en donde regalaran una beca de un año al ganador. Necesita entrar con al menos cinco dibujos y se decidio hacer retratos, pero para eso necesita algun modelo.
-Oh, me alegro por él pero, ¿porque ustedes no son de modelo?
-No tenemo el tiempo para estar sentadas por dos horas mientras termina de dibujar.
-Oh.
El ambiente se volvió un poco incomodo despues de eso y Rose inmediatamente volvio a despedirse comentandole por ultimo que lNathaniel se encontraba bajo la torre Eifel y que fuera al menos a darle un vistazo si es que necesitaba ayuda.
Marinette emprendió camino de nuevo.
Sus pensamientos de inmediato se llenaron de imagenes de Adrien. La peliazul fruncio el ceño, sacudiendo la cabeza con fuerza para quitarselo de la cabeza, sin buen resultado.
Recuerdos de ellos, pocos, pero realmente memorables y preciados para ella.
Estaba locamente enamorada de Adrien, de eso no habia ninguna duda y, aunque le fastidiara, sabia que el rubio no correspondía sus sentimientos. Pero ese no era su problema. Su problema era la forma en que Adrien comenzaba a tratar a sus compañeros de clase.
Era mas...cortante. No de la forma en que es Chloe, pues ella es cortante y burlona al mismo tiempo, no solo ofendiendo a las personas sino haciendoles quedar en ridiculo. Pero Adrien...él era otro caso.
Actuaba como si ya nada le importara y le molestaba no saber como ayudarlo.
-¿Marinette?
La peliazul abrió los ojos sorprendida. Sus pies le llevaron justo a donde se encontraba la torre Eifel, y debajo de ella se hallaba Nathaniel sentado en el suelo con su sketch en su regazo.
Sus ojos verdes le miraban con curiosidad y preocupacion.
-Ah, hola.
-¿E-estas bien? Te ves algo fastidiada.
-No, no. Estoy bien, no te preocupes – respondió, sonriendo.
Debatió por un segundo en su cabeza sus opciones en ese instante y optó por la mas educada. Se sentó en el suelo frente a Nathaniel y dejo sus cosas a un lado, cruzandose de piernas y apoyando su cabeza en una mano.
El pelirrojo le miró con curiosidad antes de estallar con un sonrojo, miraba a todos lados excepto a los ojos azules de Marinette quien le miraba sin parpadear.
-¿Y bien?
-A-Ah...
-Rose me comentó sobre tu concurso y que necesitabas a alguien como modelo, - Marinette se encogio de hombros - pensé que tal vez podria ayudarte.
-Oh, uh, pues, si no es ninguna molestia.
-Claro que no, si no, no me hubiese sentando aqui contigo.
Nathaniel asintió, aún algo nervioso y con sus mejillas rojas.
Tomó su lapiz y re-acomodo su sketch en sus piernas. Levanto la mirada y sus ojos cruzaron con los ojos azules de Marinette.
-¿P-Podrías poner una pose diferente? -preguntó el pelirrojo.
-Claro, ¿cual te parece mejor? - Marinette, para aliviar un poco el ambiente incomodo en el que se encontraban, comenzo a posar de formas graciosas, creyendo que tal vez Nathaniel se relajaria.
Y funcionó.
La ultima pose que hizo, la de levantar los brazos como si tuviese musculos y algo superheroico, le hizo estallar en risas. Ella tambien sonrió satisfecha.
-Todas las poses me gustaron, pero creo que me quedo con la pose del pensador.
-Lo suponía - respondio, rodando los ojos, aun con la sonrisa en su rostro. - Mas te vale darme un premio por ser tu modelo, ah.
-Oh, claro. Podria invitarte a comer algo, -¡No es como si fuera una cita! ¡S-Seria algo como salida de compañeros, n-nada mas!
-Que sea una salida de amigos, entonces. -comentó, tomando la pose del pensador y dirigiendo su mirada hacia otro punto.
No llego a ver la pequeña sonrisa timida que se formo en el rostro del pelirrojo, quien comenzo a dibujarla.
''Salida de amigos'', pensó Nath, dandole un vistazo a Marinette, ''Si me considera su amigo''
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Ayudame a ayudarte
RomanceMarinette tiene que madurar; eso es lo que ella necesita creer para poder seguir con su vida. Siente que su enamoramiento se vuelve ridiculo, ve que sus sentimientos cambian por otra persona; y terminara conflictuada cuando vea que ya no solo se pre...