Mi Hermosa Idol Favorita

La nueva Idol

Todos miraban con determinación y sorpresa a la peli-rosa. No despegaban su mirada de ella, y los susurrosnya estaban comenzado. Y con eso, posiblemente los chismes.

-D-disculpe... - habló uns chica captando la atención de la peli-rosa- ¿E-es usted... Sakura Mori? - preguntó nerviosa la castaña.

La chica se la quedó viendo por unos minutos antes de reaccionar -Claro - sonrió como respuesta.

La castaña sonrió a más no poder y sacó rápidamente de su mochila una libreta abierta junto con un lápiz -¿M-me podría dar su firma? - preguntó de nuevo entregándole su lápiz.

- Por su puesto - tomó el lápiz gustosa - ¿A que nombre lo firmó? - preguntó tomando con delicadeza la libreta de la chica.

- E-este... Hana - dijo.

La peli-rosa no perdió tiempo y firmó la hoja señalada por su admiradora.

-Toma - Sakura extendió la libreta junto con el lápiz.

-¡Muchas gracias! - exclamó alegre la chica abrazando la libreta como un tesoro.

-No hay de que- contestó con una sonrisa.

-¿¡ Es verdad que usted es la famosa cantante!? -pregunto un chico entre gritos sorprendido.

- Claro... Pero no se si sea muy famosa - contestó insegura.

- Claro que eres muy famosa, ¡Todos te amamos! - dijo otra chica emocionada acercándose a ella a toda prisa.

-! Queremos tu autógrafo! - dijo una rubia corriendo con una libreta extendida, en respuesta a que la firme.

Desde ese punto, todos los del pasillos se acercaron corriendo a Sakura con algo que firmarles felices de que su cantante favorita este ahí. Y nadie podía detenerlos.

Solo gritos de los fans se escuchaban en todos los pasillos.

🌸🌸🌸🌸🌸

- Que extraño - murmuro un rubio viendo a su alrededor.

-¿Qué pasa?- preguntó el castaño poniéndose a su lado.

-No escucho los gritos de las chicas - contestó extañado - Tampoco las veo-

-¿No que te molestaba? - preguntó inseguro el menor de los hermanos.

- Mmm.. No se - sonrió -Tal vez, me guste ver como todas se mueren por tenerme - dijo con un aire de orgullo.

- Mejor así, no soporto los gritos de las demás - dijo el mayor de los hermanos sin despegar su vista de su libro abierto que sostenía en sus manos.

- Aja si, yo se que también te gusta, Ruki-kun - dijo el rubio a su hermano. Sin embargo, este solo lo miró con seriedad.

-Tch, ya vámonos - dijo el castaño caminando por los pasillos.

Los demás simplemente se fueron por su camino. A excepción de Kou y Yuma, que iban en el mismo salón.

🌸🌸🌸🌸🌸

Los gritos no paraban y no planeaban hacerlo. Los alumnos no dejaban de pedirle firmas a la Idol nueva.

La peli-rosa trasaba su camino entre los alumnos mientras que firmaba lo que le pedían. Agotador, y eso que apenas comenzaba la noche.

-Disculpen - dijo Sakura abriendo paso con un poco de dificultad.

-¡Espera! - gritaban la mayoría de los alumnos agitando sus cosas para que las firme.

De un momento a otro, los gritos aumentaron, y los alumnos, sobre todo las chicas, empezaban a dar pequeños saltos de emoción.

Por accidente, alguien empujó a la peli-rosa, haciendo que está choque con algo y caiga al suelo.

-¿Estas bien?- preguntó una voz masculina extendiendo su mano para levantarla.

-E-este... Si, gracias- acepto su mano tallandose un poco su cabeza.

Se levantó del frío suelo, y miró al chico que le ofreció su mano.

Rubio, ojos azules celestes, su ojo derecho tapandoselo con su cabello, y un perfecto rostro. Aunque, en su mirada mostraba dolor ocultandola bajo una sonrisa.

A su lado derecho, estaba un chico alto,muy alto,cabello castaño amarrado en una coleta. Su mirada mostraba soledad y dolor al igual que el otro chico.

-Gracias - dijo de nuevo la chica fijándose en los dos.

-No hay de que - dijo el rubio guiñandole un ojo, mientras que el otro se retiraba.

Todos guardaron silencio por un momento, prestando silencio a esos dos Ídolos en medio del pasillo.

-Un gusto, mi nombre es Kou Mukami - dijo con una sonrisa,haciendo que algunas chicas suspiraran.

Sonrió de igual manera - Encantada, mi nombre es Sakura Mori-

Kou se la quedó viendo por un momento,sabiendo lo que estaba haciendo. Pero lo que le sorprendió era que no fingia nada; su sonrisa era real, a pesar de su dolor.

-¿Pasa algo?- preguntó la chica al notar que se la quedaba viendo por mucho tiempo.

- Nada, nada - dijo reaccionando al instante.

Nueva estudiante.

Nuevo amor.

¿Qué pasará?