Mes y medio

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Esto parecerá acosador pero ya me aprendí él horario que sigues cada día de la semana, hasta lo anote en mi libreta de pendientes sin saber todavía la razón.

Los lunes haces unos cuantos estiramientos, dibujas, tomas un té de rosas acompañado de un trozo de pastel, peinas a tu labrador y finalmente esperas a que la luna aparezca para entrar.

Él martes siempre lo comienzas con un libro de gran grosor acompañado de una taza de café extra fuerte, continuas tejiendo la bufanda azul que llevas haciendo desde que llegue, arreglas un montón de muñecas hechas a mano de distintas maneras para meterlas en la misma maleta de siempre que como cada martes vuelve a estar vacía y hasta que tu perro no salga a buscarte no entraras a descansar para él día siguiente.

Los miércoles te encargas de regar y cuidar las plantas de tu balcón, luego te sientas bajo la ensombrillada mesa y te pones a escribir en un pequeño y gastado cuaderno hasta cansarte e irte a la cama.

Los jueves bordas cojines con frases muy inspiradoras lo que me hace pensar que eres toda una poeta, arreglas tus uñas con sumo cuidado y sutileza, compartes galletas y leche chocolatada con uno de los niños del vecindario hasta él atardecer él cual siempre te quedas observando con una cámara en tus manos, ¡Hey! ¡Tenemos algo en común!, eso me hizo realmente feliz la primera vez que te ví.

Los viernes son mis preferidos, te pones a bailar por todo él balcón sin necesidad de música, luego te pones a pintar como él primer día que llegue aquí, lees unas revistas y dependiendo de la que leas te pondrás a hacer lo que dice, recuerdo que la semana pasada te pusiste a hacer unas extrañas posiciones que supongo eran algún tipo de ejercicio benefactor para el cuerpo, si que me reí aquel día y siempre de los siempre al caer la noche te quedas hasta muy tarde viendo las estrellas en él cielo.

Y los días que mas odio de la semana son los sábados y los domingos porque siempre te quedas dentro de casa y apenas miras hacia él balcón, es realmente deprimente.

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