[Shire en multimedia]
Narra Alice
Me encontraba en la limusina en dirección a la escuela, aún me pregunto, a qué verdad se refería Vit? Supongo que con todo lo que pasó en su casa...eso en serio me sorprendió, jamás pensé que Kokoro sería capaz de hacer algo así. Pero bueno, no importa.
Ya habíamos llegado a la escuela y estaba caminando por uno de los pasillos hasta que fui tomada y halada hacia los estacionamientos por un muy nervioso Shiro. Y se preguntarán ¿como sé que esta nervioso? Lo siento, además... Sus manos están sudadas, eso es signo de nerviosismo.
—Shiro yo-
—No hables por favor, no ahora.
—...Guardé silencio hasta que llegamos donde los demás.
—Alice hoy no irás a clases —Shiro me soltó dejándome muy confundida.
—qué? A qué te refie-
Vit me agarró de la mano y salió corriendo arrastrándome hacia un bosque muy cercano de la escuela, éramos seguidos por los demás.
-
—Espera...! Vit! A donde me llevas?! A donde me llevan?!—Calma Alice! Estás en buenas manos, confía en mí.
Miré al frente y vi que nos dirigíamos a un precipicio...podía escuchar el mar.
—VIT! Para! Hay un...!
No pude terminar Vit paró junto al precipicio empujandome haciendo que cayera sin él.
—AHHHHHHHHHHH!! —cerré los ojos con fuerza pero escuché a Vit reírse de mí a lo lejos.
-splash-
Escucharon? Soy yo Hundiéndome en el mar.... No puedo respirar... Siento que el aire se me va poco a poco, entrecerré los ojos y de repente ya no estaba en el mar (creo) sólo veía oscuridad a mi alrededor pero seguía cayendo aunque con un ritmo más lento...no no caía descendía con elegancia, no, más bien flotaba, miles de objetos flotaban hacia arriba a mi alrededor, tomé uno era una carta de corazones la miré detalladamente y la solté; me di vuelta para ver hacia abajo, no veía nada además de los objetos, parecía que iba a caer por la eternidad, cerré mis ojos tratando de relajarme —y sí ya podía respirar— empecé a escuchar una dulce melodía que me hipnotizaba... Y no supe nada más.
[...]
Abrí los ojos, estaba acostada sobre una gran cama blanca en un gran cuarto blanco con detalles celestes y azules, no tenía mi uniforme, tenía puesto un vestido largo blanco y tenía el cabello suelto. Me levanté e inspeccioné el lugar había una puerta blanca de cristal que llevaba al balcón, salí a ver.
—no puede ser... —abajo estaba el rosal rojo y podía ver como si estuviera en una especie de castillo
—El lugar del sueño! —entré a la habitación y luego me dirigí a la puerta negra de madera— aquí vamos —la abrí y me encontré con un pasillo blanco con ventanas con cortinas azules pero éstas no tapaban la luz, miré al suelo y vi la larga y casi sin fin alfombra azul.
—cómo es posible...? Oh...estoy durmiendo —reí, era obvio, pasé mis pies descalzos por la alfombra azul, se sentía demasiado real.
Caminé por el pasillo encontrando más puertas negras, pero no les hice caso; llegué hasta una escaleras y bajé a la primera planta.
Caminé por otro pasillo de alfombra azul hasta que al ver por una ventana pude divisar a Kokoro caminando con Daiya por un camino, pero ellas lucían diferentes.
Caminé un poco más hasta llegar a otra puerta de cristal que se encontraba abierta.
Salí, daba lugar a un hermoso jardín con rosas blancas y rojas que eran acompañadas por la naturaleza hasta llegar a unos muros altos blancos.
Mire a lo demás, todos absolutamente todos, estaban vestidos diferentes incluso estaban diferentes en sus formas.
—Alice! —Kokoro y Daiya me sonrieron alegres a lo lejos, caminé hacia ellos hasta quedar en frente de todos.
—Este sueño es hermoso!
—sueño? —Me miraron divertidos.- no es un sueño.
—...quiero respuestas, Ahora —dije lo más seria que pude, pero jamás pensé que lo que me dijeron era la realidad...
La muy extraña realidad.
[...]
Estaba sentada en medio de todos muy sorprendida, Wonderland me dijeron, no puedo creerlo esto no es real, dije, pero ellos me demostraron que sí lo era ¿cómo? Me mostraron mi mochila, me enseñaron que lo que tocaba era real y sí, era real esto es real no puedo creerlo ellos? Ellos...?
—Qué son ustedes? —me alejé un poco asustada.
—tranquila Alice —vi una gran sonrisa espeluznante aparecer al lado mío y en un parpadeo Shire estaba parada allí con...orejas de gato?!— no mordemos
—ah! —salté alejándome de ella— qué eres?!
—creo que es obvio —se inclinó haciendo una reverencia— soy hija del gato de Cheshire.
—y yo del conejo blanco —miré a Shiro.
—sombrerero loco —sonrió Hatter tomando el té.
—Reina blanca —Vit estaba sentado como un rey con Shiro encima suyo.
—Reina roja —rió Kokoro divertida.
—y ustedes qué son?
—somos guardianes —Dijo Daiya.
—de?
—éstas —Hagi me enseñó una hermosa joya con forma de trébol.
Miré a Daiya.
—mira —me enseñó un collar con una joya en forma de diamante.
—y esta/—Kuro me enseño una joya con forma de pica.
—qué tienen de especial...?
—son...por así decirlo, vida —Daiya sonrió un poco y ocultó su collar a la vez que los dos chicos guardaban las joyas.
—pero porqué estoy yo aquí...? —los miré confundida.
—pues...verás... —Kokoro rascó su mejilla mirándome.
—ven sientate —Vit palmeó su lado y yo fui a sentarme.
—Te lo explicaremos... En cuanto vayas a cambiarte claro.
—cambiarme?
—sí, las chicas te llevarán.
Dicho eso me tomaron de los brazos arrastrándome de vuelta al castillo. Miré hacia arriba sorprendida y vi a Shire volando sobre nosotras mientras agitaba su cola aún sonriendo.
Llegamos a la habitación donde me encontraba antes y me dijeron que esperara, al rato volvieron con un vestido azul que tenía detalles blancos y un delantal que terminaba haciendo un lazo negro, una diadema de lazo negro, zapatos de tacón negros y unas medias largas negras o con blanco. Ya vestida me levanté y di una vuelta viéndome al espejo.
Estoy lista para saber la verdad de una vez por todas...y estoy segura de que me gustará más de lo que pienso.
ESTÁS LEYENDO
Alice In The Bad Wonderland
FantasyUnos pensarán "La Alice buena niña que cae al país de las maravillas" y otros "la Alice que es sádica y mata a todos" pues no, esta historia es una combinación de ambas a mi manera.