Capítulo 7

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Me levante a las seis de la mañana, ya Alex estaba despierto, le di una sonrisa y el la imitó, por lo menos se que las cosas están bien
- debemos salir, antes de que nos regañen - yo solo asentí y salimos de la habitación
- pensé que nunca llegarian aquí están las llaves de la camioneta para que busquen la comida, Alex las tomó y salimos de la casa
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- aquí esta todo lo que pidió la señora amanda - dijo el campesino
Alex tomo una caja y yo otra, ya habíamos llevado otras tres hace rato, nos montamos en el carro y Alex comenzó a manejar
- me rugen las tripas - dije cuando sentí como se retorcía todo en mi estomago no había desayunado y ya eran alrededor de las diez de la mañana, mi estomago pedía a gritos comida
- a mi también pero hay que esperar hasta el almuerzo, si es que nos dan comida -  yo reí por su comentario, me encantaba pasar el rato con el
Al llegar a la casa, amanda ya estaba afuera esperándonos
- vayan al jardín, ahí está su familia, hoy es el día de visitas
Alex y yo hicimos caso a los que nos dijo esa mujer  y caminamos hasta el jardín, allí estaba mi mamá y mi papá y a su derecha estaba hector, esperen un momento ¡hector!, el no podía estar aquí si Alex lo ve, esto es realmente malo
- hija te extrañamos - dijeron mis padres abrazándome, si me quisieran no me hubiesen mandado a este lugar, pensé
- princesa te extraño - hector se acercó a mi y me dio un beso en los labios, yo me separe rápido pero no tanto para que el no se diera cuenta, mire hacia donde estaba Alex y el nos miraba fijamente, seguro que no me hablará por el resto del día, hector junto nuestras manos y nos sentamos
- y como la estas pasando? - pregunto mi padre
- mal,  esa tipa esta loca, estoy castigada y cree que con quitarme los desayunos y las cenas va a resolver todo, solo hará que me de un cáncer en el estómago -  mi papá solo reía eso me saco de mis casillas - porque te ríes, acaso crees que para acomodar a alguien le tienes que quitar su comida, la comida es sagrada, ni siquiera eso acomoda a lasa personas, nadie puede acomodar a nadie, uno mejora cuando uno quiere y solo porque me quedo el año tu mandas a este campamento, que poco ético - Chanel basta - dijo mi madre al ver que todos nos miraban, no se en que momento comencé a gritar

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