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Iba a atinarle el siguiente golpe cuando unos largos brazos me apartaron sutilmente de la odiosa chica que yacía tumbada en el suelo. Reconocí la inconfundible colonia de Shawn.

No sigas, no merece la pena que sigas con esto- Me dijo susurrándome en el oído.

Estaba respirando entrecortadamente por la inexplicable ira que sentía. El director se acercaba a nosotros con paso decidido llevando detrás a Jade y Perrie junto con las miradas de todos los alumnos. Llego hasta Leigh y le tendió el brazo para ayudarla a levantarse. 

Ustedes dos- Nos dirigió una mirada acusadora- me vais a acompañar a mi despacho tenemos un largo, tema del que hablar.- nos nombro a la vez  ajustándose su chaqueta de pana que le quedaba algo ajustada.

Dio una señal para que lo siguiésemos. Todos los alumnos se apartaron a su paso y con las cabezas  hacia al suelo las dos  íbamos detrás de él. Dirigidas derechas hacia lo peor que tenia meterse en problemas. Abrió la vieja puerta que llevaba hasta su despacho. Me senté en una de las dos sillas que había delante del escritorio Leigh hizo lo mismo. El director recoloco los papeles que tenia esparcidos por la mesa ya sentado.

No me esperaba este comportamiento por parte de las dos, señoritas - dijo con un aire de decepción- Por ello como castigo tendréis que limpiar todo lo que ha formado las señorita Leigh después de que terminen las clases de hoy 

¡¿Porque tengo que hacer algo que no es culpa mía?!- Eleve mi tono de voz mirándolo con rabia

 Usted señorita María lo tendrá que hacer con ella por haber solucionado el problema con violencia- dijo el director frunciendo el ceño

Agache la cabeza escuchando la larga charla que nos daba: sobre respetarnos, la amistad, la violencia.. bla bla bla. De reojo veía como Leigh se reía silenciosamente de la forma que había actuado al haberme enterado del castigo y como al final ella salia ganando en todo los sentidos. 

Termino la charla y nos permitió irnos hacia la siguiente clase. Tenia la ropa manchada pero al menos el liquido era inodoro y podía esperar hasta llegar a casa para cambiarme. Durante la clase de matemáticas Camila se sentó a mí lado intentando subirme el animo con bromas y frases inspiradoras. Ya terminando la clase empezó el ultimo chiste.

El ultimo te lo prometo ¿Te puedo contar un chiste verde rápido?- dijo con una sonrisa divertida 

Vale- dije mirándola sonreír

Una lechuga en una moto-me eche las manos a la cara moviendo la de un lado para otro 

Creo que si te haces comediante te vas a morir de hambre- Ella estallo en carcajadas haciéndome a mí también reír. 

Al sonar la campana me fui a la entrada del patio donde ya estaba todo preparado para empezar a limpiar: cubos llenos de agua, paños, fregonas apoyadas en la pared y una escalera para llegar a los puntos mas altos. Leigh tenia la camiseta remangada mostrando su piel algo aceitunada y con los brazos apoyados en forma de jarra.

Aquí viene la reina de Roma, ya pensaba que lo tendría que hacer sola- dijo con voz petulante mirando para otro lado

Me hice la sorda no quería comenzar otra pelea no necesitaba otro problema. Moje uno de los paños en el cubo y empece a frotar intentando que las manchas se fuesen. Ella cogió las escaleras, subió haciendo lo mismo con las manchas en los puntos mas altos. Estabamos en un cómodo silencio cuando la escuche volver a hablar.

Me he enterado de que te gusta Magcon- dijo parando- ¿Sabes? A mí también me gustan

 Ah que bien..- Dije limpiando con algo mas rápido. La realidad no me interesaba mucho estaba algo incomoda  con ese tema iban a venir a Barcelona y yo no tenia las entradas. Mi única esperanza era el sorteo que realizaba la empresa Coca-Cola donde te daban la oportunidad de ir y conocerlos. Las probabilidades eran de 1% contra 99% de que me tocase.

¿Tienes las entradas?- Dijo con una sonrisa desafiante.

No, no he podido comprarlas- Dije apretando el paño en mis manos

Ah ¿no? Que pena que no hayas podido comprarlas se acabaron hace unos días-continuo entretenida limpiando- Yo al menos podre conocerlos, abrazarles... Seguro que Cameron queda encantado conmigo.

Ya harta de que se burlase de mi no pude contenerme mas, agarre el cubo por sus bordes levantándolo por encima de mi cabeza. El agua estaba algo sucia al haber limpiado los paños en ella. Con todas las fuerzas que me estaba dando la rabia en ese momento le lance el cubo lleno hasta arriba de agua desde la cabeza a los pies.

La cara que puso al sentir  todo lo que le vino encima no lo olvidare en mi vida. Abrió los ojos de par en par y con los labios formo una perfecta O. Me empecé a reír con tantas ganas. 

¡TE VAS A ENTERAR COMO TE PILLE!- Grito de una manera que daría miedo a cualquiera pero a mí me hizo reírme mas incluso. Salí volando de la escena corriendo a la velocidad de la luz por los pasillos  con el eco de mis carcajadas.   

    

     

  

Nadie se lo imaginaba || Cameron Dallas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora