4.Encuentro

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Espero que os gusten las canciones que pongo. ('-')

The Charming

Me fui a esconder a un callejón para esperar a que todos vinieran. Cuando el Insti se empezó a llenar de gente salí de mi escondite sin que nadie se diera cuenta. Hoy iba vestida de otra manera. Para llamar la atención de los chicos y para ser el icono de moda de las chicas.

Llevaba un jersey marrón claro hasta la cintura que combinaban con mis botas de tacón que llevaban un encaje blanco y cordones blancos. También llevaba una falda por encima de las rodillas y hasta la cintura, era de cuadros con distintos tonalidades de rojos. En honor a mi odiosa Ladybug mi bolso rosa pequeñito lo había cambia por uno con forma de mariquita. Y en vez de llevar dos coletas sosas, me puse un moño alto, que como siempre me ate con una cinta de terciopelo roja.

 Y en vez de llevar dos coletas sosas, me puse un moño alto, que como siempre me ate con una cinta de terciopelo roja

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Decidí que hoy todo el instituto estaría a mis pies. Chicos y chicas. Sin "querer" me choque con varios chicos que se me quedaron viendo hasta que desaparecí de su vista. Y a las chicas que me veía de lejos les mostraba mi mejor sonrisa. Todo estaba saliendo como yo quería.

Mientras caminaba vi a Alya. Alya... Otra a la que tengo que agradecer. Me dirigí hacía ella. Vi que estaba hablando con Nino. Por lo que tenía entendido, a Alya le gustaba un poco. Y por eso, Nino, pronto estaría también a mis pies.

Cuando estuve a su lado la salude amablemente. "Buenos días Alya" le dije con una de mis mejores sonrisas falsas. "¡Wao! Marinette que cambio" me dijo mirándome de arriba a bajo. "¡A que si!" Le dije fingiendo emoción. "¿Tu que opinas? Nino" le dije acercándome a el. Pude ver como se ponía rojo y no le salían las palabras. Sonreí malévolamente y pícaramente para mi misma. "E-Eh... Si claro" me dijo aun rojo. "Gracias" dije con una sonrisa súper dulce. Mire a Alya de reojo. Parecía molesta y sorprendida. Que espléndida visión.

"¡No! ¡Para!" Me grito alguien desde mi cabeza.

"Por favor" me suplico.

"Marinette, no te alteres. Ellos te engañaron. Solo descansa" le dije para que me dejara seguir con mis planes. Se callo. Les dedique una sonrisa a Alya y Nino. Después de eso me dirigí hacia mi clase.

Mi plan consistía en que todos estuvieran a mis pies y dejar los últimos a Alya y Adrien. Porque mientras sus amigos y conocidos iban cayendo, ellos dos seguirían normales, sin entender que pasaba.

Adrien

Me dirigí a la escuela. Aunque no llegara tarde tenía mucho sueño. Ayer por mucho que busque a Ladybug no encontré nada. Pero ahora no era momento de buscarla, tenía que ir a la escuela.

Cuando llegue la gente estaba mas alterada de lo que normalmente están. Algunos miraban en la misma dirección que otros. Decidí mirar aquello que estaba llamando la atención de todos. Me sorprendió mucho lo que vi. Era una chica que me daba las espaldas, pero desde atrás también se podía apreciar su linda figura.

Iba con un jersey y unos zapatos a juego, incluyendo una falda roja a cuadros y un bolso que me recordaba a Ladybug. Al pensar en eso me fije en el peculiar color de cabello que tenía la susodicha. Era azabache, al igual que mi amada Lady. Eso me sorprendió un poco no podía ocultarlo. Decidí ver el rostro de la muchacha que me recordaba tanto a mi amada Ladybug.

Cuando por fin alcance a ver su rostro no dude en sorprenderme. Era Marinette. Me acorde de lo que paso ayer. De un día a otro cambio mucho. Y me preguntaba si era mi culpa. Pensé que lo mejor seria ir a hablar con ella, así que me acerque. "Buenos días Marinette..." Le dije cuando estaba muy cerca suyo. Ella se dio la vuelta, me miro y me dedico una sonrisa. En el momento en el que iba a sonreír de vuelta me fije mejor en la sonrisa. No era como las avitualles. Era distinta, como más fría y cruel de lo normal. Decidí ignorar ese pequeño detalle.

Todos entramos en clase. Y como siempre yo me senté delante de Marinette y ella detrás mío. "Pss" me llamo Plagg. "Ahora no hay queso" le dije para que para de fastidiar. "No es eso, estúpido" "¿Como que estúpido?" Le dije enfadado. "Si, estúpido. Pero lo que quería decir es que noto la presencia de un akuma" en ese momento me puse alerta y mire en todas las direcciones posibles. No vi nada. Afuera no se escuchaba nada sospechoso, ni gritos, ni explosiones... Nada raro.

Las clases continuaron con normalidad hasta que llego la hora de irse. Durante ese periodo no pude evitar mirar varias veces a Marinette. Estaba distinta. Pero no solo físicamente sino que también mentalmente.

Al salir me decidí transformar e ir a ver si había algún Akuma. Como no encontré nada me fui a La Torre Eiffel. Una vez ahí me senté y mire a las parejas que había debajo mío. Pensé en Marinette y porque la rechace. "Buenos días, gatito" dijo una voz familiar desde mi espalda. "¡My Lady!" Grite antes de darme la vuelta debido a que me había tapado los ojos con las manos. "¿Seguro?" Me dijo la voz soplando en mi oreja. Me gire rápidamente a la vez que me apartaba. Vi a una chica detrás mío. Esta me miraba con una sonrisa diabólica. "¡¿Quien eres?!" Pregunte un poco alarmado. "¿Quien soy? Que cruel que no te acuerdes de mi" me dijo haciéndose la ofendida y poniendo una mano es su pecho. "Soy tu amada Ladybug" me dijo aun sonriendo y acercándose a mi. "O... También puedes llamarme The Charming"

Estaba confundido. La chica delante mío decía ser mi Ladybug y físicamente se parecía pero de carácter... Me fije mejor en ella. Su traje rojo lo sustituyó por un vestido blanco, en vez de topos llevaba rombos azul oscuro. Era sin mangas y en su lugar llevaba unos guantes blancos hasta los codos. Y una mascara que también era blanca con rombos azules oscuros. Las medias al igual que los rombos eran de color azul oscuro. Atadas a las piernas y brazos había unas cintas de color amarillo. Me fije mejor en su rostro y puede comprobar que no estaba mintiendo. Era Ladybug. Aunque lo único que no me cuadraba era su comportamiento. "Ladybu" me interrumpió poniendo su dedo en mi boca. "No me llames Ladybug. Yo soy The Charming" me dijo. Trague saliva y decidí hablar. "The Charming, ¿Porque has cambiado tu nombre, tus vestimentas y tu carácter?" Pregunté esperándome la peor de las respuestas.

"¿Quieres escuchar una historia, Chat?" Me dijo sonriendo

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"¿Quieres escuchar una historia, Chat?" Me dijo sonriendo. "Vale" acepte.

La odiosa Ladybug Donde viven las historias. Descúbrelo ahora