Instituto Heisenford

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Me levante por la maldita alarma del demonio. Me fijo la hora y son las 6:15 am. Hoy es mi primer día en el Instituto, y, literalmente, tengo un humor de perros así que mejor que nadie se meta conmigo.

Me dirijo hacia el baño y me miro en el espejo. Ha pasado una semana desde que llegamos Austin y yo a Los Ángeles. Esta semana ha sido muy agradable. Fuimos de picnic junto con Austin y mis abuelos. Fuimos a restaurantes, a comer helado, a recorrer la ciudad, que es muy MUY hermosa. Mi abuela me regalo una guitarra ya que conoce mis gustos y amor hacía la musica y mi abuelo me regalo un skate y DIOS MIO ¡me encanta! Me volví toda una experta, okno todavía me falta aprender pero ya se lo básico. Y a Austin también le regalaron cosas.

Termino de bañarme y me visto con lo primero que veo en el armario. Una camiseta blanca corta con cuello en forma de V o corazón como ustedes quieran decirle. Encima de esta un abrigo fino floreado que no se como se llama. Un short de jean celeste con encaje blanco y por ultimo mis vans negras.

Me dejo el pelo suelto y ondulado, un poco de rimel y ya esta.

Agarro mi mochila, me la paso por el hombro y bajo encontrándome con mi abuela haciendo el desayuno...

-Hola abu-digo sin emoción alguna mientras tiro mi mochila al sofá.

-Hola preciosa-contesta mientras sigue haciendo el desayuno- ¿Estás emocionada por tu primer día de escuela?

Fruncí el ceño.
-Se puede decir que... ¿Si? Nose la verdad.-Contesto mientras tiro la mochila a algún lado de la casa.

-Yo creo que te va a ir de 10.-Dice girándose hacía mi dirección y apoyando sus manos en la mesada- Por 2 cosas. La primera es porque hice estos panqueques con nutella y te vas a ir contenta y gordita- Le hice una cara coqueta para luego reírme- Y segundo porque eres muy bonita y divertida y les vas a atraer a todos.

-Ya quisieras tu abuela- contesto achinando los ojos y poniendo cara de incrédula.

***
Ahora mismo estoy en el auto de Austin...si, mis abuelos le regalaron un auto... maldita suerte tiene el nene... dirigiéndonos al instituto escuchando a todo volúmen "Sex-Cheat Codes, Kris Kross Amsterdam" .

Al llegar todos nos miran ya que parecemos dos retrasados cantando hasta quedarse sin respiración. Y si, no parecemos... lo somos. Austin estaciona el auto y nos bajamos los dos al mismo tiempo. SIP, el poder de los gemelos. CHANANANANANAAAA *música alienígena*

-Adios hermanita. Suerte.
-Adios hermanito. Suerte a ti también.

Mi hermano se dirigió hacia algún lado que no le preste atención.

Yo por mi parte me voy por el lado contrario. Todas las miradas están posadas en mi y no me puedo sentir mas incomoda.

Y ¿qué creen?
El 99% de las chicas son unas putas de plástico.
Y el 99% de los chicos son unos mujeriegos engreídos y estúpidos. ¿Como lo se? El poder de la gran sabia Melissa. Okno. Pero se nota a simple viste porque las putigolfas, si asi les digo yo, te miran con desagrado como si fueras un mutante y los idibeciles, así les digo a los estúpidos de los Playboys, te comen con la mirada.

Estaba mas perdida que Hitler en el día del amigo buscando la oficina del director o directora porque este instituto ES MAS GRANDE QUE ES MISMISIMO DESIERTO DEL SAHARA. Sigo buscando con la mirada hasta que una chica alta, rubia y con los ojos celestes claro, muy linda a decir verdad, me agarra del brazo haciéndome girar.

-¿Perdida?

-Eso creo-Le digo mientras me mira con cara divertida- Amm.. puedes decirme don..

-Donde esta la oficina del director-Dijo interrumpiendome- Lose lose, todos los nuevos pasan por lo mismo-Dijo giñandome el ojo.

Hey MelissaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora