Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, no sólo tiene uno de los acrónimos más incómodos que conozco, sino que representa una parte importante de mi vida. Tener déficit de atención es de las cosas más molestas del mundo, nunca en mi puta vida logré explicarle a mi profesora por qué no copio sus lecciónes o por qué en 4° grado en vez de terminar mis apuntes de matemáticas me la pasaba haciendo barquitos de papel. Toda mi existencia me sentí un incomprendido, y no por que me faltara atención o no tuviera amigos, sino por que no podía coincidir con nadie, nadie tenía las mismas ideas que yo y el resto del mundo me parecía simplemente aburrido. Las costumbres grises de los chicos de mi edad, como salir a bailar música molesta, beber hasta reventar, manejar sin sentido con música a todo volumen al rededor de la avenida principal como putos retrasados, todo me parecía tan, tan aburrido. Mi viejo solía preguntarme por que no salía con amigos a hacer cosas de "adolescente" y mi respuesta siempre fue; meh. Desde chiquito escucho mucha música y sobre todo me gusta la música que tiene un sentido lírico más amplio que la misma estúpida apología al sexo que escucho en tantas canciones contemporáneas. Las canciones populares deberían hacer un mejor uso de su poder (El poder de llegar a millones de personas) ejemplares de vida como Michael Jackson, John Lennon, Jimi Hendrix y Freddy Mercury usaron su música para contar historias, inspirar, motivar, y llenar de vida a las personas con mensajes que iban más allá de los temas conocidos mundialmente, ellos hicieron que su música valga la pena, y Pasaron de ser Pop Rock, a Ser artistas excepcionales. Yo? Pasé de hablar de TDAH a Hablar de mi niñez, a hablar de los artistas que influenciaron generaciones a pensar distinto en menos de 350 palabras. Ese, amigos míos, es el ejemplo más claro de Déficit de Atención.
Lección #1 : Usa tus debilidades a tu favor
