Perversiones

986 71 28
                                    


Minseok acababa de llegar a casa, estaba agotado, tanto que rechazo la oferta de sus compañeros, que le invitaron a ir con ellos a comer algo. Todo Exo paso la mañana entrenando y durante la tarde ellos se dividieron en dos grupos, que mezclaban Exo-k y Exo-m , para así poder asistir a un programa de radio y a una sesión de firmar autógrafos.

Cuando entro vio a Sehun tumbado, con los cascos puestos y medio adormilado, Xiumin sonrió, el pobre maknae también parecía agotado, el decidió no molestarle y continuar hasta su cuarto, deseoso de descansar, contento de que al contrario que los demás, el tenia su cuarto para él solo, era su pequeño privilegio, pues se suponía que lo compartía con los managers, aunque ellos jamás se quedaban, aun así escogieron a Minseok por ser el más limpio, tranquilo y responsable de todo Exo.

Cuando llego hasta su puerta, el se congelo, pues escucho gemidos que provenían de su cuarto, por un segundo sintió la ira recorrer su cuerpo, al pensar que dos de sus compañeros estaban usando su cuarto para tener sexo, claro que eso quedo descartado rápidamente, ya que solo se escuchaba a una persona gemir.

En su mente solo podía pensar, en quien estaba dentro y por que había escogido su cuarto, - Joder ¿será algún tipo de fantasía de alguno de estos degenerados?- pensó Minseok, mientras dudaba entre sí entrar a su cuarto y interrumpir al susodicho avergonzándole, o esperar a que terminara la faena y luego mantener una más que vergonzosa charla, sobre lo ocurrido.

De pronto escucho a la persona que gemía hablar, el no podía creerlo, se quedo completamente petrificado, pues reconoció la voz perfectamente, era la voz de su mejor amigo, el reconocería su voz entre miles, pero lo peor es que había escuchado como decía entre gemidos, su nombre repetido sin cesar, - o dios mío, esto no puede ser, tengo que haber oído mal, si eso es, he oído mal- se dijo a sí mismo.

Con sumo cuidado, pego la oreja a la puerta, para escuchar mejor, y así convencerse de que no acababa de descubrir a su mejor amigo Luhan, masturbándose en su cuarto, mientras decía su nombre entre gemidos de placer. No paso mucho hasta que volvió a escuchar la inconfundible voz melodiosa de Luhan, gemir su nombre, ahora tenía la certeza, Luhan su mejor amigo se estaba masturbando y fantaseando con él.

Minseok sabía que lo correcto sería alejarse, hacer como si no hubiera oído nada, pero su cuerpo se negó a moverse, el permaneció allí escuchando aquellos gemidos y suplicas de Luhan.

- Oh mierda, esto ya es demasiado, esto no puede estar pasándome a mi- dijo Minseok susurrando, al notar como los gemidos de Luhan, habían conseguido excitarle y ahora tenía un gran problema con el que tendría que lidiar- perfecto, esto es hasta humillante... joder...

Mientras Minseok se encontraba fuera escuchando atento todo lo que hacía su mejor amigo, Luhan, este estaba efectivamente tocándose pensando en él. No tenía la costumbre de ir y masturbarse en la habitación de su mejor amigo, era la primera vez que lo hacía, normalmente iba al baño como cualquier chico normal, en la ducha y alguna vez en su propia cama, pero jamás ahí donde estaba en esos instantes.

No había sido algo planeado, no era como si Luhan se hubiera levantado esa mañana con esa idea en la cabeza, fue algo que surgió así de la nada, espontáneamente, por el calentón del momento. La cuestión era ¿Qué diablos estaba haciendo Luhan para que se calentara de esa manera?

Algunos miembros de Exo se habían ido a la radio y a hacer unas sesiones fotográficas. Entre tanto trabajo, seguro que iban a llegar muy tarde, todos pensaban eso. Luhan estaba enamorado de Minseok desde pocos meses después de conocerlo. El chino no pensaba enamorarse tan fácilmente después de la última ruptura que tuvo con su ex pareja, pero poco pasó para que cayera perdidamente enamorado de Minseok. Por supuesto, era algo que jamás iba a decir.

PerversionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora