Me levanté hacia mediodía. Sin saber por que me sentía cansada pero con mucha fuerza de voluntad salí de la cama y me fui al piso de abajo. Allí se encontraba Jorge con la mirada perdida en la televisión. Me acerqué a el un poco tímida y le acaricié el brazo. El solo subió la mirada hacia mi. Una lágrima se le escapó. Yo se la limpié y me senté a su lado. Me dieron ganas de abrazarle y así lo hice. El me abrazó fuerte y nos quedamos así varios minutos. Después de separarnos me quedé mirándole. Y entonces ocurrió. No se que nos pasó por la cabeza a los dos ni que impulsó a que lo hiciéramos pero lo hicimos. Se acercó poco a poco y me beso tiernamente. No sé por que pero me dejé besar. Empezó a bajar sus besos por mi cuello. Yo eché mi cabeza hacia atrás y le dejé más espacio. Fue bajando poco a poco y me quitó la camiseta que llevaba puesta que acabo en la otra punta del salón. Yo metí mis manos debajo de su camiseta y se la quité. Le acaricié. Nuestros pantalones acabaron bien lejos de nosotros. Me quito la ropa interior y exploró todo mi cuerpo. Cuando sentí algo entrar en mi gemí alto. Me metió dos dedos, tres y cuatro. Yo gemía hasta más no poder. Se quitó su ropa interior y me penetró. Yo no paraba de gemir. El me penetraba más rápido y mientras tanto jugaba con mis pezones. Cuando estaba a punto de llegar al orgasmo el paró.
-¿Por... porqué paras?
Sin contestarme bajó hasta mis partes y empezó a lamer. Empecé a gemir. El sonrió un poco. Le sonreí de vuelta y volví a gemir. Llegué al orgasmo pero ahí no acabó. Me volvió a penetrar. Cada vez más rápido. Yo gemía y gemía. Llegamos al orgasmo juntos. Salió de mi pero siguió sin acabar. Empezó a jugar con mis pezones. Los tenia erectos y rojos. Los succionaba con gusto y yo no me oponía. Le agarré su p*n* y le empecé a masturbar. Empezó a gemir.
-No pares de gemir.- dije excitada
-No lo haré
Gimió mas alto y se corrió en mis pechos. Después me empezó a masturbar a mi. Me metió dos dedos y los sacaba y metía muy rápido. Gemía mucho. Después empezó a lamer. Me metió la lengua y empezó a dar vueltas sobre mi clítoris.
-No pares.- gemí
-¿Lo quieres más rápido?
Asentí y lo hizo más rápido. Me agarré al sofá y llegué al orgasmo. El siguió lamiendo y me corrí. Quería más pero solo lamió mi corrida.
-Por favor sigue.- le supliqué
-Ana ya es un poco tarde. Mañana te prometo que seguimos.- Me cogió en brazos y me subió a mi cuarto.
-Pero... ¿Qué hora es?
-Son las once de la noche
-¿Tan tarde es?
-Cuando haces cosas todo se pasa más rápido
Se metió en mi cama y se tumbo a mi lado. Aun desnudos el miró cada parte de mi cuerpo. Tocó mis pechos suavemente. Luego me miró tiernamente.
-Eres perfecta.- susurró
-No lo creo.- Fue lo último que dije antes de que me quedara dormida.
A la mañana siguiente Jorge seguía a mi lado pero estaba despierto y me sonreía. Yo le sonreí. No entendía mis sentimientos hacia el pero sentía mariposas en el estómago. Entonces me di cuenta de la realidad. Me había enamorado de Jorge. Pero... ¿Cómo era posible?. Quería buscar a Brujo y poner mis sentimientos claros. Entonces me acerqué a Jorge y le susurré:
-Ayer me dejaste con ganar de más
El sonrió pícaramente y se puso encima de mi. Directamente bajó a mis partes y empezó a lamer. En seguida empezaron los gemidos por mi parte.
-Ana gime mi nombre. Dilo alto.- volvió a lamer
-¡¡¡Jorge no pares!!!. ¡¡¡Sigue!!!
-Eso. Gime mi nombre más veces.
Noté su p*ne en mi culo
-¡¡¡¡¡¡JORGE METEMELA!!!!!!
Lo hizo en seguida. Me penetro rápidamente. Yo gemía y gemía como una loca. Escuché como decía mi nombre.
-Más rápido Jorge
Me penetró más rápido y llegué al orgasmo. Caímos rendidos y nos quedamos dormidos
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Luces en el camino
Science FictionAnabella es una chica de dieciséis años que anda buscando al amor de su vida desaparecido de repente. Decide empezar a buscarle sabiendo que se arriesga a perder su propia vida o incluso a enamorarse de personas equivocadas. Anabella deberá elegir q...