Un chico bobo con teléfono

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Era una mañana soleada, con nubes tan blancas como la nieve y, como siempre, yo iba de camino a la escuela con mi mejor amiga Berenice. En ese momento reinaba el silencio. Trataba de sacar un poco de platica, pero nada me llegaba a la mente. Hasta que ella lo rompió.

-¿No te gustaría enamorarte algún día?

-¿Enamorarse?, eso es ridículo.

-Sí, lo se. Pero encontrar a alguien que te ame...

-¿Amar?, ¿Enserio?- interrumpí

Seguimos caminando en silencio, hasta llegar a nuestra enorme escuela. Ahí nos encontramos a nuestra mejor amiga, Helena.

En ese momento note que mis agujetas estaban desabrochadas, mientras arreglaba mi problema de zapatos Helen y Bere hablaban sobre el baile de bienvenida. (Donde se supone que los hombres invitan a las mujeres). Cuando de repente siento que alguien golpea mi estomago mi y cae encima de mi, y ahí estaba el, un chico bobo con teléfono.

-No deberías estar tirada en el piso!!, ¿ Que te sucede?- grito

-Y tu no deberías estar en el teléfono, deberías concentrarte por donde caminas.

Seguimos discutiendo hasta que llego mi amiga Liza.

-Hey tranquilos, solo fue un empujón.

-¿Un empujón?!!-grite

No pudimos acabar la discusión, ya que en ese mismo instante sonó la campana y cada uno regresó a su salón. En el recreo solo nos lanzábamos miradas de odio y furia, pero admito que empezaba a tener sentimientos por el.

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