APOLOGY

Songfic: Apology

Estoy aquí nuevamente, en este lugar que tú solías esperar mi llegada, pero sin ninguna razón válida yo ya me había ido, había desaparecido. Te dije tantas mentiras para que creyeras en mí y tú lo hacías como una tonta. Te dije tantas veces que te protegería...pero se convirtió en una promesa vacía al ser yo tu principal fuente de dolor. Que idiota fui al no haberte dado el valor que te merecías, que idiota fui al comportarme como un niño inmaduro que te ocasionaba problemas y preocupaciones constantemente. Ahora estoy arrepentido, pero no sirve de nada...tú ya no estas.

-Está anocheciendo, deberías ir a casa.- esa voz, no era otra más que la de mi buen amigo JinHwan.

-Soy un idiota... déjame, me merezco esto y más.- dije un poco molesto, pero no con él sino conmigo mismo por todas las tonterías que hice.

-Vamos.- dijo tomándome del brazo para levantarme.

-¡Te dije que no!- me moleste aún más y me zafé de su agarre con un movimiento un tanto brusco.

-¡¿Crees que vas a solucionar todo quedándote aquí?!- gritó enojado y preocupado por mi, pues se notaba que quería llorar.- ¡Si tanto la quieres de vuelta ve y habla con ella!- me dijo molesto parándose frente a mí para que lo observase.

Mi amigo tenía razón, no iba a cambiar nada con quedarme aquí recordando el ayer y arrepintiéndome de ello. Así eran todos los días de mi vida desde que ella decidió marcharse, iba a ese lugar lleno de recuerdos dolorosos lamentándome de mis actos y posteriormente JinHwan venía por mí para llevarme a casa. Pobre de él, seguramente está cansado de hacer esto todos los días. Le he dicho ya bastantes veces que deje de hacerlo, pero él insiste en cuidarme.

-Vayamos a casa.- le dije resignado, pues sabía que no se iría sin mí.

Llegamos a mi departamento y JinHwan me indicó que me sentará en el sofá y obedecí. Miré al techo y la imagen de su rostro lleno de lágrimas volvía a mi mente.

-¡Maldición!-grité en susurro completamente molesto, su recuerdo me seguía atormentando.

Busqué con mi mirada a JinHwan y me di cuenta de que estaba en mi habitación acomodando mi cama para que yo me fuera a dormir. Él sabía que yo no tenía a nadie más que a él y me cuidaba bastante como la persona tan increíble que es. Ojala le hubiera hecho caso a JinHwan cuando me decía que le prestara un poco más de atención, quizá nada de esto hubiera sucedido, pero el "hubiera" no existe y tengo que pagar las consecuencias de mis actos.

-He arreglado tu cama para que vayas a dormir, pero creo que deberías ir a tomar un baño primero para que te relajes un poco.- me dijo amablemente.

-Está bien, gracias.- respondí cabizbaja.- No sé qué haría sin ti.-expresé agradecido por su gigantesca compasión y bondad.

-Cualquier cosa que necesites avísame. Nos vemos mañana.-se despidió y salió por la puerta.

Me levanté del sofá y caminé al baño para hacer lo que mi buen amigo sugirió. Abrí la llave de la regadera para después entrar y sentir como el agua recorría velozmente cada centímetro de mi cuerpo desnudo. Su sensación era muy refrescante, pero no lo suficiente como para aliviar mi alma.

Terminé de ducharme y me dirigí al refrigerador por algo de comida, pero no había nada, estaba vacío. Tenía mucho tiempo sin comprar nada para llenarlo, era bastante deprimente, ni siquiera tenía ánimos de comer, solo lo hacía porque tenía que hacerlo.

-Las 10:30, demasiado temprano para dormir.-dije mirando el reloj que se encontraba en la cocina.

Fui a la sala desobedeciendo a mi amigo para mirar el televisor por un momento, pues no tenía nada más interesante por hacer. Encendí el televisor y cambié de canal hasta que me topé con uno de los dramas que ella solía ver. Lo miré por algunos minutos y las escenas que transmitían parecían estarse riendo de mí, parecían que me decían -Bobby, esto fue lo que pudiste tener.- como si fuese un pecador solo quise huir. Apagué el televisor y me dirigí rápidamente a una tienda cercana por una buena botella de alcohol.