Capítulo 1: Agua Fresca

154 5 6
                                    

Mi nombre es Hope Wood, (para las personas de habla hispana Hope significa Esperanza), actualmente soy una mujer de 28 años, abogada y defensora de los derechos a niños con discapacidades, quiero contarles mi historia, tal vez no sea la mejor de todas pero marcó gran parte de mi infancia, un poco dulce pero aterradora al mismo tiempo como también algo compleja si se podría decir.

Todo comenzó una linda tarde de Verano, era el 28 de Junio del año 1995, lo recuerdo como si hubiera sido ayer. Mi hermano Jorge y yo estábamos disfrutando de la frescura del agua, bañandonos en una piscina inflable en un pequeño patio de un vecindario muy tranquilo, pero no por mucho, vivíamos en un pueblo llamado Laurelton, ubicado en el condado de Unión al norte de Pensilvania, nuestra madre llamada Victoria nos vigilaba a Jorge y a mi por que siempre peleábamos (típico de hermanos), mi padre no se encontraba, al parecer estaba "trabajando" ya que al preguntarle a mi madre decía: -"Está trabajando", ya no preguntes.

Yo en esa época tenía como unos 7 u 8 años así que era muy curiosa, astuta y perspicaz para mi edad, mientras que mi hermano tenia 6, era un poco lento y siempre lo arrastraba conmigo a donde fuera, pero volviendo al tema de mi padre, muchas personas iban a la casa buscándolo, pidiéndole a mi madre que Funes nombre de mi padre, diera la cara que no fuera gallina, el casi nunca estaba en la casa y cada vez que preguntaba por él mi madre solo decía: -"Está trabajando", ya no preguntes (esta vez con voz temblorosa y a punto de llorar).

A la mañana siguiente siendo aproximadamente las 5 am, se escuchan varios hombres tocando a la puerta diciendo:

 -Abra... es la Policía. 

Mi madre asustada y nerviosa nos dijo:- quédense en su habitación hasta que yo les diga, todo estará bien. 

Mientras abrazaba a mi hermano mi mente decía que todo estaba mal y al mismo tiempo me preguntaba -¿qué hacen ellos aquí?, ¿tendrá algo que ver mi padre en esto?, sin respuesta alguna y con muchas dudas me acerque a la ventana y vi que mi madre estaba siendo arrestada por mantener y resguardar a un criminal, o al menos eso escuche que dijo el oficial de la Policía, (si se dan cuenta de que hablo en ciertos puntos de manera diferente, es porque lo hago como si fuera esa época otra vez, siendo yo una niña reviviendo y explicando todo de nuevo).

Continuemos, mientras veía a mi madre ser arrestada Jorge y yo llorábamos porque no comprendíamos bien lo que pasaba, unos hombres entraron a nuestra habitación y dijeron: -"Todo estará bien" niños (frase que actualmente odio), - "los llevaremos a un lugar mejor"- decía el oficial de la Policía.

Subimos al auto y durante todo el camino preguntábamos, ¿donde está nuestra mamá? Sin dejar de llorar y sin soltar a mi hermano, el oficial respondió: su mamá hizo algo muy malo y debe responsabilizarse por lo que hizo, decía.

Llegamos a una gran casa de color azul cielo, en el pórtico nos esperaba una mujer con cara de pocos amigos, al salir del auto la mujer se acercó y dijo: -¡Hola! niños, Yo soy Dinora su "niñera" temporal, mientras guiñaba el ojo, y con una gran sonrisa, parecía ser doble cara pensaba, ¿cómo pasó de tener mala cara a una enorme sonrisa?, me preguntaba, pero con muchas dudas y preguntas sin respuesta solo me quedaba cuidar y confiar en mi hermano, Dinora era linda (sin mal interpretar) su cabello castaño claro liso, sus ojos color avellana, su piel era blanca aunque algo rasposa, media aproximadamente 1.56 mt de alto, o al menos así la recuerdo, el policía nos dijo: -niños ella es su "Tía", ella los cuidara mientras su madre se "recupera", yo en el momento estaba en shock ya no sabia que pensar o que decir, Jorge apretaba mi mano muy fuerte, el solo era un pequeño e inocente niño de 6 años con dificultades para aprender (eso creo), pensé durante el momento aunque no se porque.

Pasado un buen rato entramos a la casa, era muy bonita, pisos de madera, muchas habitaciones, una biblioteca hermosa, siendo sincera mi habitación favorita era el cuarto de juegos me encantaba mucho, nuestra "Tía" Dinora nos llevó a ver nuestras habitaciones.

Subimos las escaleras y de repente me pareció ver una sombra entrar en una habitación en particular, era una puerta grande, de solo verla un escalofríos invadía tu cuerpo, de color marrón oscuro, con diseño y grabados antiguos, tenía un enorme candado en la cerradura, debido a que algunas de las preguntas que he hecho no he obtenido respuestas, preferí no preguntar nada acerca de esa puerta, Jorge se escondía detrás de mí y cerraba los ojos apretándolos al punto de llorar, yo sequé sus lágrimas, lo mire fijamente y por no decir la frase que odio le dije: -Saldremos de esta hermano pase lo que pase.

Al acercarse a la puerta se podían escuchar susurros, era algo como ssshhh-un silencio escalofriante, realmente no se si era un truco de mi mente o si de verdad estaba sucediendo, Dinora nos dijo que nos alejáramos de esa puerta y que no debíamos preguntar nada sobre ella, a lo cual respondí -perfecto, de verdad no sabía si era nuestra tía pero si los policías y ella lo dice entonces le creo por ahora (aunque sigo dudando que no lo es). Ella era muy amable con nosotros, siempre nos traía dulces y salíamos a pasear todos los fines de semana, de noche nos arropaba, nos leía un cuento y dormíamos pacíficamente, un día todo cambio (como suele pasar en toda historia) nuestra supuesta "tía" abrió  el escondite numero #3 denominado así por Jorge y yo para el cuarto súper raro, estábamos jugando las traes y mientras perseguía a Jorge vi que Dinora entro a la habitación escalofriante, por error dejo la puerta medio abierta pensé en acercarme lentamente para que mis pasos no se escucharan en la madera vieja, abrí la puerta, vi un pasillo largo pintado de blanco con luces blancas (era mucho blanco para mi, me encandilaba) al final des pasillo quedaba otra puerta también de color blanco pero más vieja, desgastada, deteriorada y hasta oxidada.

Se lograba escuchar unas personas gritando como discutiendo, al acercarme más reconocí la voz de Dinora había otra voz era de hombre no supe a quien le pertenece, no la reconocía, sentí que alguien se acercaba así que salí corriendo de hay, en el segundo piso es donde se encuentra la puerta y en el pasillo para llegar a la misma está una mesa con flores de lavanda, así que me escondí bajo la pequeña mesa esperando escuchar algo más, de pronto sentí que alguien estaba detrás de mi pero me daba miedo voltear, estaba asustada y al pendiente de los movimientos de Dinora, mi corazón latía con fuerza, no supe reaccionar ante la situación, tocaron mi hombro haciéndome voltear, cuando lo hice grite con todas mis fuerzas sin abrir los ojos aun sin saber quien me toco el hombro, cuando abrí los ojos me di cuenta que era Jorge y dijo: -Te encontré las traes, lo empuje en señal de enojo estaba molesta, confundida con todo lo que pasaba, tantos secretos y cosas ocultas.

Dinora se acerco preguntando que había pasado: -¿Que pasa?, ¿por que gritas Hope?, dije:-Jorge y yo estábamos jugando las traes pero me asusto, Dinora: -pensé que les había pasado algo, no se si soportaría perderlos niños, al ella decir eso me di cuenta que "nos quiere" de alguna forma o manera porque: nos dio un techo donde quedarnos, nos ha dado tiempo de calidad para salir a pasear, entre otras cosas más que ni nuestros padres nos han podido dar, no quiero sonar codiciosa y menos egoísta, solo pienso que nuestros padrea debieron dedicar aunque sea 10 minutos de su tiempo en Jorge y en mi, pero creo que Mamá se preocupaba más por Papá que por nosotros, (me gustaría estar en nuestra antigua casa reunidos todos cenando en familia en paz, sin conflictos, pero creo que la vida siempre es injusta de cierto modo con las personas que no lo merecen). 

Volviendo al tema, mientras Mamá estaba en la cárcel y no sabíamos el paradero de papá, solo dependíamos de Dinora. 

Hope: -Este día fue muy largo y agotador para mi, mejor me doy un baño y me acuesto a dormir; dije nerviosa. 

-¡Vamos Jorge!, hasta mañana Dinora. 

Desde que tomaba una ducha hasta el momento en el que me acosté en la cama no dejaba de pensar en que había al otro lado de la puerta, aunque de igual forma no pude dormir gracias a Jorge y sus ronquidos, él por supuesto durmió pacíficamente  mientras que yo no podía sacarme de la cabeza esa tonta puerta, ¿que era lo que se encontraba de tras de ella?, ¿sera un cuarto vació?, ¿o solo Dinora entra ahí para estar sola y pensar?, de tanto echar cabeza toda la noche sentía que explotaría pero si sabía algo, que llegaría al fondo de todo este misterio.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 26, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hope Donde viven las historias. Descúbrelo ahora