Missing Prince - L.S. (Terminada)

Bonus III

Era temprano. El calor mas la pesada armadura que llevaba el Rey, lo habían hecho sudar. Acababan de volver del pequeño Viaje que les había tomado mas de lo esperado.

El día anterior, el Rey acompañado del Capitán de los guardias, y unos Soldados habían ido cabalgando a una Reunión Política que se llevo acabo en una pequeña ciudad a 3 horas en caballo. Cunado quisieron volver, una lluvia fuerte estaba cayendo del cielo, por lo cual tuvieron que pasar la noche en la no tan grande, pero acogedora casa especialmente construida para invitados del Gobierno.

Louis sonrió internamente, finalmente habían llegado devuelta a su Palacio. Habían partido en la madrugada.

Espera que Harry no haya estado esperándolo toda la noche. Se sentía mal por haber dejado solo a su amante en su primer día juntos. Pero se lo compensaría.

Por Suerte, hoy solo tenia la tarea de repasar los planes para la fiesta que se organizara en dos semanas en su palacio. Era su fiesta de cumpleaños, una fiesta no tan privada. Vendrían personas de oficios importantes, pero por suerte su mejor amigo Lucas había prometido estar presente. No había visto a Lucas en dos años, desde que ese se fue a España. De todos modos, aun se enviaban cartas de vez en cuando.

Louis descabalgo su caballo, lo dejo en los establos y se dirigió directo a la cocina.

"Quiero un desayuno con miel a mis aposentos." Ordeno, sin siquiera mirar a la cocinera. Estaba demasiado perdido en sus recientes pensamientos de cómo pasaría la siguiente hora con Harry.

Se le antojaba cubrir el Pecho de su amante con gotas de miel para poder limpiar esa piel con su lengua. Esa imagen le había estado persiguiendo en las ultimas horas. Quizás hoy podrían hacer un pequeño procedimiento y Harry lo dejaría tocarlo en ciertos lugares. La ultima vez el rizado había estado demasiado inseguro y nervioso. Louis se dirigió hacia la biblioteca, para sacar su libro favorito, quería leerlo de nuevo y mostrárselo al rizado. Seguramente Harry nunca había visto un libro en su vida, después de todo cada escritura en papel tenia su precio.

"Su alteza." Lo llamo Logos, el Capitán. El rey se volteo y sonrió amable.

"Come algo y descansa. Puedes tomarte el resto del día libre." Hablo Louis, sin pestañar. Estaba muy cansado del viaje y entendía que Logos también. Logos era un fiel capitán, una persona de confianza, buena y justa.

"Capitan, Ah, mi Rey." interrumpió una tercera voz. Ambos se voltearon, para ver a Lokon, la mano derecha de Logos. "Disculpe la interrupción, pero tenemos a un niño que logro entrar al palacio. Pensamos que quería robar algo. Lo están interrogando ahora mismo. Que debemos hacer con el , señor?"

Louis frunció el ceño. Desde cuando había niños que intentaban entrar a su palacio? "Dices que logro entrar? "preguntó Louis sorprendido y enfadado, ya que esto era prueba de que los guardias no habían estado del todo atentos.

Lokon empezó a balbucear inseguro "Em, Si –i , su alteza."

"Como es eso posible? Y que es lo que quería robar?"

"Ayer el niño vino y dijo que si no lo dejábamos entrar, se quedaría sin lugar donde dormir, asi que le dimos espacio en la cabina. Esta mañana el chico salió silencioso y camino hacia el palacio. Lo detuvimos cunado aun estaba en la entrada del palacio. Y , la verdad, es que no sabemos si es culpable o no. Si lo que dice, son mentiras, entonces lo hace muy bien"

"Ire a verlo ahora." contesto Logos. "Mi rey. " dijo con una reverencia, listo para retirarse.

Louis asintió, dejando el problema en manos de Logos. Se volteo para ir a su habitación y ver a su amante, pero el Sonido de una voz lejana lo detuvo.

"Yo...yo solo vine a..a ver a...al Rey. Lo juro. " dijo la voz, temblando de lo que parecía ser miedo.