Nunca he sido mucho de diarios.
En realidad me encantaban; quería llenarlos de ideas y anotaciones, que fueran bonitos con muchos colores, que quedaran bien, ordenados y con buena letra.
Duraba 2 días, no más. Lo encontraba absurdo, ¿para qué? Si nadie los iba a leer y olvidados quedarían después.Ahora le doy una nueva oportunidad, pues si bien no será un diario como tal podrá servirme de desahogo en mis ideas tontas, en mis frases sin sentido, en mis pensamientos que se quedan en eso, pensamientos, y que ahora he decidido que deben convertirse en palabras porque: ¿por qué no?
Si queréis acompañarme en este algo extraño proyecto, adelante, seguid leyendo.
Igual os sentís identificados u os sirve de inspiración o de vía de evasión. Sólo vosotros lo podréis saber, si os quedáis.Hasta pronto, espero.
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Si callas, cuantas cosas te pierdes.
Teen FictionDobles intenciones y significados rebuscados. ¿No es divertido jugar? Prueba a decir alguna verdad a escondidas, tras algo que impida verla más allá de las palabras escritas.