Whatsapp ➳l.h

001✉

La melodía de The silence inundó mis oídos, "ha llegado un mensaje" pensé. Desbloquee la pantalla de mi móvil y efectivamente era un mensaje.

Número desconocido: "Hola preciosa"-miré extrañada el mensaje, luego el número, no lo reconocía.

"¿Quién eres?"-teclee.

Número desconocido: "Ahora es lo que menos importa, así que, ¿cómo éstas?"

"No te diré como estoy, ¿quién mierda te dio mi número? ¿acaso es una puta broma?"

Número desconocido: "No me hables así pequeña:( me haces sentir mal"

"Deja la broma ya, ¿quién eres?" leído 12:40

"¿Me escribes para luego dejarme en visto? Que te den por el culo idiota"

Ultima conexión 12:42

-Menudo idiota, ¿qué se cree?

-¿Con quién hablas?-preguntó Daphne

-Hablo sola, bueno, no tan sola...-me miró raro-no me mires así-reproché-un idiota me a escrito y solo le  respondía... En fin, ¿iremos al concierto del grupo de Ashton?-dije sirviendo jugo en los dos vasos.

-Es obvio, quiero ver que bombones me puedo encontrar por ahí-alzó ambas cejas repetidamente.

-¿papas o galletas?-pregunté mostrando ambos empaques.

-Me ofendes-dijo llevando una papa frita a su boca.
-¿no comerás?-preguntó mientras miraba el televisor.

-No tengo hambre-respondí

-Más papas para mi-dijo, a lo que reí.

Al terminar el programa de televisión decidimos ir a prepararnos.
Salí de la ducha envuelta en la toalla; tomé mi ropa interior y me la coloqué; saqué un jean color negro y una camisa de tirantes. Al terminar de cambiarme cepille mi pelo y tome una mochila, en la cual introduje mi móvil y algunas cosas necesarias.

-Estas guapa-dijo Daphne

-Deja de bromear y vámonos.

-Esta bien, esta bien, estás de muy mal humor ¿eh?-preguntó encendiendo el coche.

-Me encuentro normal, ahora pisa el acelerador. No quiero llegar tarde-dije abrochando mi cinturón.

-Lo que usted diga mi señora-dijo haciendo un raro acento. Reímos juntas.

-Aveces me pregunto de que basurero te saqué-dije a lo que ella me dio un zape-la vista en el volante, no quiero morir.

Encendí mi reproductor de musica, prefería mil veces estar en cualquier otro lugar que estar rodeada de demasiados adolescentes con las hormonas a millón. Sí, así es.
Un chico había intentado ligar conmigo, pero lo único que consiguió fue que mi puño estallara en su cara.

-Tienes que controlarte, no puedes ir por ahí golpeando gente porque si-dijo Ashton.

-Golpearé a quien se me de la gana. Es mi puño no el tuyo. Sera mi mano la que se reviente, no la tuya.

-Tienes problemas de ira, ¿has tomado tus medicamentos?-cuestionó elevando su ceja, yo me limite a rodar los ojos.

-Que te den-grité saliendo de la habitación. Tome mi chaleco del perchero y salí a la calle.

Las farolas iluminaban el parque, la luna estaba asomada por entre las nubes. Y, a pesar que era un excelente paisaje mi humor era pésimo.
-Tengo un genio de mierda-susurré mirando mis zapatillas.