Arrancaba flores, rompía espejos, se producía heridas en sus muñecas, y luego se quedaba dormida, acurrucada entre las sabanas frías. Tiene una sonrisa, joder, una sonrisa preciosa.
Parte sin título 5
Arrancaba flores, rompía espejos, se producía heridas en sus muñecas, y luego se quedaba dormida, acurrucada entre las sabanas frías. Tiene una sonrisa, joder, una sonrisa preciosa.