''Otra vez no''
-Respóndeme bien ____- Gritaba mi padre.
-Lo siento, tienes razón papá- Respondí de mala gana.
-Ves que contigo no se puede hablar de nada, siempre hablando mal, pones tus estúpidos ojos en blanco, me faltas el respeto ____- Mi padre seguía gritando y sentí como litros de agua se acumulaban en mis ojos a punto de salir. -Y no me digas que ahora te pondrás a llorar como una idiota, ve y ayúdale a tu madre- Ordeno como si no le importara lo que hiciera con mi vida o lo que sentía ante sus insultos. * Soy tu hija, no tu mucama * Pensé, pero no podía decirlo y me dirigí a la cocina cargando litros de agua en mis ojos, no quería llorar, no otra vez.
-Te ayudo en algo mama?-Pregunte con la voz quebrada.
-Pásame unas papas- Contesto ella mientras revolvía una olla que desprendía un rico olor. Tome las papas y se las alcance. -Ahora porque peleaban?- Pregunto sin quitar sus ojos de la olla.
-Ya sabes mama, lo de siempre, estaba en la computadora y empezó a gritar, diciendo que nunca hacia nada y todo eso y Louis se metió- Una lagrima cayo por mi mejilla y mi Louis entro en la cocina.
-Porque en vez de dejar a papa de mala manera no le contas como le contestaste tu cuando el te reto?- Dijo el en tono victorioso.
-Vete Louis- Dijo mi mama..
-Y sabes algo, mañana te iras en el autobús escolar como todos los idiotas de la clase- Entro mi papa detrás de Louis gritando como siempre.
-Ya Sean, no grites- Dijo mi mama tratando de calmarlo, yo seque rápido mis lagrimas.
-Hay, pobrecita, ya esta llorando- Exclamo Louis en tono burlón y salió de la cocina.
-Siempre te haces la victima, sabes que, por eso mismo no te daremos tu mesada por 3 meses- Agrego mi padre, agache mi cabeza y vi como una lagrima caía directo al suelo. -Y esta noche no comes por llorar- Salió de la cocina mi padre con su mentón en alto y su tono orgulloso como todo un ganador.
-Soy tu hija- Susurre despacio.
-Que es lo que hiciste?- Insistió mi mama.
-Nada mama- Conteste mientras los litros de agua que llevaba acumulados cayeron por mi rostro y corrí al baño como lo hacia de costumbre luego de una de esas peleas.Eres una buena para nada, No tienes futuro, vivirás bajo un puente, eres la desgracia de la familia, irresponsable, idiota, inútil, tarada, estúpida, porque no eres como tu prima o tu hermano, eres la hija que nunca desee * Esas eran las palabras de mi padre que me llevaban a esto, cortarme.
Las lagrimas no paraban de caer de mis ojos como la sangre salir de mi muñeca, en mi cabeza me repetía * No lo hagas, tu no eres débil * pero las palabras de mi padre, el que me dio la vida, el que quiso tenerme, aquel que dijo que daría todo por mi, no paraba de correr por mi mente y me incitaban a que lo siga haciendo. Me pare del piso y vi algunas gotas de mi sangre en el piso. Haber llegado hasta eso, algo que miles de veces dije que no aria, para mi ya era un punto muy bajo, pero no encontraba otra salida o al menos no quería encontrarla, era mi forma, mi manera de descargarme.
Tome un poco de papel y seque la sangre roja del suelo blanco y luego lave mis manos y mi muñeca.
-Ash- Exclame, dolía mas el roce del agua con esas heridas que el filo de la pequeña cuchilla cortando la piel de aquella delicada zona, ese ya era un dolor al que me había acostumbrado. -Algún día llegare a mis venas e iré contigo-Agregue entre susurros y luego me seque las manos. -Ash- Ardía mas el contacto de la piel lastimada con la tela de la toalla. Salí del baño y me fui directo a mi cuarto, solo quería dormir y olvidar todo lo que había hecho, además de que mañana me debería despertar temprano porque debía ir en autobús.
*Solo duerme * Repetía en mi mente. * Solo hazlo *