Hay momentos en la vida en los que tienes que pararte delante del espejo y preguntarle a tu reflejo:
"¿Quién soy?".
La verdad que yo lo he hecho muchas más veces de las que quisiera admitir y, yo creo que casi todos nos hemos preguntado eso alguna vez, ¿no?
Aunque no lo creas, y si te dijera que tú tienes la respuesta a esa pregunta.
La gran mayoría de nosotros creemos que sabemos quienes somos, que sabemos porqué hacemos las cosas, y que tenemos una identidad propia, totalmente original. Pero solo el ser humano es tan idiota de mentirse a si mismo, y encima, creérselo.
Cosas tan cotidianas y normales como maquillarse, tu peinado, tu manera de vestir, las amistades, tu trabajo, tus sueños... Te aseguro que todo eso puede estar mucho más condicionado por la opinión de los demás de lo que tú te piensas.
Ejemplos como:
"Cariño, ¿porqué te maquillas tanto, qué mas da lo que piensen los demás, si sabes que para mi estás guapa igual?".
"Nene, ¿para qué te machacas tanto en el gimnasio si a mi me encanta que tengas barriguita?".
"Pero si yo no lo hago por los demás, lo hago por mi, para verme yo mejor".
Ya, claro, la opinión de los demás no es importante.
Entonces, si no te importa, ¿porqué preguntas si te queda bien? ¿O si te ves un poco pasado de kilos? ¿O si deberías hacerte o no hacerte ese corte de pelo? ¿Porqué limpias la casa a fondo cuando tienes visita para causar buena impresión?
No sé, ¿cuántos, cuántos de vosotros escucháis música que os da vergüenza admitir delante de vuestros amigotes? ¿O pedís el coche a vuestros padres porque os da vergüenza llevar vuestra carraca a una primera cita? Peinaditos, con la mejor ropa que tengáis, y si es de marca o alguna falsificación para aparentar, pues mucho mejor.
Imagina que una mañana te despiertas y estás en una isla desierta. Eres el único habitante, sin padres a los que hacer sentir orgullosos, sin jefes a los que rendirles cuenta, sin amigos con los que aparentar para ser aceptado, sin chicos ni chicas a los que impresionar para gustarles... Estás solo, nadie te va a juzgar. Puedes hacer lo que quieras, cuando quieras y de la manera que quieras. Es que es una sensación de libertad que no se puede explicar. Y es en ese preciso momento en el que tienes que sentarte y hacerte las preguntas correctas.
"¿Me esforzaría tanto en arreglarme si no hubiera nadie que me mirara, o que me juzgara?".
"Y mis aficiones, ¿seguiría machacándome tanto sin rivales con los que competir?".
"¿Y qué hay de mis sueños? ¿Porqué mis metas pierden sentido al estar solo en esta isla?".
Perdonarme que os chafe esa imagen tan sólida que tenéis de vosotros mismos, pero pongo la mano en el fuego afirmando que a la gran mayoría de nosotros nos daría igual la ropa que lleváramos, si llevamos el pelo corto o largo, si nos huele el sobaco o el aliento. Nos importaría una mierda las formalidades.
Sin darnos cuenta, dejaríamos de lado todas aquellas cosas que hacíamos como robots programados con tanta normalidad, y empezaríamos a actuar dejándonos llevar por nuestros instintos y nuestras emociones, de una manera totalmente libre, sin miedos, sin prejuicios.
Y es muy posible que de repente descubras cosas nuevas de ti que no te gusten, o que la gente te trataría como un loco; pero el estar solos, es cuando dejamos de ser falsos y hacemos lo que queremos sin disfrazarnos o escondernos para encajar en la sociedad.
No hace mucho, estaba caminando por la ciudad con una amiga y me preguntó que si no me sentía incómodo cuando la gente hablaba de mi; y es que me salió del alma cuando le dije:
"Cuanto menos me importa la opinión de los demás, más libre me siento".
No se trata de ser un antisocial, o un salvaje. Se trata de no ser un hipócrita contigo mismo, aprender a diferenciar las cosas que salen de ti de manera natural, de las que haces para ser aceptado, para no parecer un bicho raro, para gustar.
En definitiva, saber quién eres.
Yo durante mi vida he hecho muchas cosas, he cumplido los sueños y fantasías de tanta gente...
Sin embargo, yo seguía sin ser feliz.
Es que me di cuenta de que los sueños que había cumplido, no eran los míos.
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¿Quién eres en realidad?
Non-FictionEsto a mi me dio para pensar. No es original, pero me gustó tanto que quise compartirlo con todos, por si alguno no lo conocía aún. Al final, dejaré la referencia original. Espero que os dé de pensar tanto como a mi. Me gustaría que dejaseis en come...