Revelación en la ducha

Capítulo único

Acababan de entrar a las regaderas del club deportivo, se habían quedado en la cancha de football discutiendo por iniciativa del rubio que no perdí la oportunidad en competir con el azabache. Todos sus camaradas ya habían partido en busca de sus novias y ellos debían apresurarse para encontrarse con sus respectivas.

—¡Todo ha sido tu culpa teme! —Bufó quitándose la camisa— Espero que Hinata-chan no se enfade.

—Está acostumbrada a esperarte, no son nada nuevo tus retardos —comentó Uchiha imitando la acción de su compañero—; si Karin me cancela te la cobraré caro

Naruto se abstuvo a una nueva disputa pues sabía que él tenía razón y si bien nunca lo admitiría, no podía perder más tiempo duplicando la espera de Hyuuga. Sin apartar la vista con el ceño fruncido del azabache, el rubio bajó su pantalón al mismo tiempo que los bóxer, sus ojos siguieron fijos a su objetivo hasta que casi cae al tratar de avanzar hacia su toalla cuando aún llevaba los tenis puestos impidiéndole deshacerse por completo de sus prendas bajas.

Sasuke rodó los ojos negando con la cabeza, no podía creer que él fuera tan despistado y dio la espalda a Uzumaki para guardar su calzado en el casillero; tras deshacerse del short y la ropa íntima, tomó una toalla con la que se rodeo la parte baje y se dirigió bajo una de las regaderas.

Naruto imitó a Uchiha y ambos se apresuraban para evitarles una prolongada espera a sus novias, sin embargo, muy difícilmente esos dos podían estar largo rato sin discutir. Esta vez, la pelea era concerniente a que el rubio había lanzado algunas miradillas por debajo del cinturón del azabache, este último lo notó de inmediato y giró para evitar las miradas. Uzumaki, poco prudente, intentó volver a mirar aquél objeto de su interés, pero a Sasuke comenzaba a incomodarle y cuando llegó a su límite, se volvió enfadado.

—¿Qué tanto ves maldito gay?

—¿Gay? —Preguntó indignado— ¡Nada de eso! —Se cruzó de brazos y decidió dar otra mirada al mismo sitio— ¡Sólo compruebo que soy más hombre que tu!

—¡No tiene nada de varonil ver desnudo a otro hombre!

—Comparaba lo tuyo con mi "amigo" y es más grande que el tuyo —sonrió con pedantería dejando ver sin pena aquello de lo que presumía— Es obvio que te gano en esto y vaya que no es despreciable.

—¡No digas tonterías! —Uchiha lo habría ignorado pero el rubio se estaba metiendo con su orgullo y eso no lo podía permitir— Jamás podrías ganarme en algo como eso.

—¿Quieres comprobarlo? Así la humillación será más grande cuando lo compruebes con tus propios ojos.

Muy difícilmente un hombre orgulloso de sus atributos se negaría a tal reto, así que ambos se pararon uno a lado del otro para hacer la comparación. Cada uno veía la longitud desde su propia perspectiva y no se ponían de acuerdo para nombrar un ganador. Ambos se miraron desafiantemente, ahora en lo único que podían pensar era en demostrar ser el mejor y sin cruzar palabra alguna, supieron que sólo había una forma de hacer la medición de forma que fuera evidente para ambos. Como si se hubiesen puesto de acuerdo, ambos no tardaron en ponerse a labor de provocarse una erección.

En mente sólo llevaban la competitividad y era muy difícil excitarse para lograr su objetivo, debían despejar su mente y ambos lo sabían, así que se detuvieron unos segundos para relajarse y regresaron a su tarea.

—Ja, no has podido lograrlo ¿y así quieres ganarme?

—No veo que tú tampoco lo hayas logrado —señaló Uchiha—. Esto es absurdo, mejor me largo.

—¿Te rindes?

El azabache miró con desdén al rubio que sonreía con socarronería. Nadie debía llamarlo de ese modo, mucho menos Naruto, así que no dudó en volver su cuerpo de frente a su rival para demostrar que no se iría hasta dejarlo callado.