Artist || h.s au [español] ✔

Uno.

Otro día más en el infierno, pensé mientras caminaba hacia el edificio de la escuela. Era el primer día de clases del año. No estaba nerviosa, sabiendo que todavía tenía a mis amigos de los años anteriores. Estaba cansada. Este era mi último año, el año que lleva la mayoría de la tensión. Con la preparación de la universidad en un año, los profesores tratando de asegurar que tuviera un futuro con una buena carrera, casi no tenía tiempo para mí. Pero eso no es algo nuevo.

"¡Ey, Charles!" Mi amigo, Mike, me gritó. Sonreí voltéandome hacia él, empujando su torso con mi dedo índice.

"Es Charlie, no me gusta cuando me llamas Charles." Hize un puchero falso. Él sonrió sacudiendo su cabeza.

Mike y yo hemos sido amigos cercanos desde que su familia se trasladó a la calle en donde yo vivía cuándo teníamos tan solo 6 años de edad. Es un completo idiota e irritante como el infierno, pero lo quiero como a un hermano.

Colgó un brazo perezosamente por encima de mis hombros mientras caminábamos por los pasillos.

"¿Qué clases tienes?" Tomó mi horario de mis manos. "Materias básicas, blah," se rió antes de continuar. "Y luego tienes arte, imagínate." Él sonrió, devolviéndome mi agenda.

"Sí, sí, búrlate todo lo que quieras. Pero voy a ser una artista cuando salga de aquí, ya lo verás." Abrí mi casillero mientras él se apoyaba en uno al lado mío.

"Bueno, eso puedo verlo, tus padres te presionan mucho con el arte." Él dijo. Tomé mis libros y me moví hacia él.

"La presión para ser perfecta es real." Al terminar de cerrar mi casillero caminamos por los pasillos y seguimos nuestro camino hacia la primera clase.

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La emoción acumulada se notaba con cada paso que daba hacia la sala de arte. El arte era la única cosa que me daba felicidad. Mirando más allá del hecho de que es una de las cosas en las que mis padres no tienen casi todo el control, es mi cosa favorita para hacer. Tomé asiento al lado de mi mejor amiga Maddie, la cuál estaba demasiado ocupada enviando mensajes de texto en su teléfono como para molestarse en saludarme.

"Mads." Al tocar su hombro ella se voltea hacia mí, con una sonrisa creciendo en su cara.

"Charlie, amiga, ¿ te hiciste algo en el cabello?" Preguntó mientras tocaba las puntas de mi cabello. Sacó su mano, riendo.

"Sólo creció un poco más."

Un hombre alto y delgado entró por la puerta, con una maleta y café en la mano.

"Hola," puso sus pertenencias hacia abajo y se quitó la chaqueta, sentándose en su silla. "Soy el Sr. Styles, su nuevo profesor de arte." Unas chicas se rieron, mientras que todos los chicos permanecieron en silencio, era muy obvio lo atractivo que era y todos lo sabían. Pero no podíamos hacer nada al respecto, esa es la lucha más grande de tener maestros guapos.

Ignoré sus lindos rizos castaños y sus carnosos labios, junto con sus ojos verdes. También traté de ignorar su hermoso acento. ¿Saben lo difícil que es tratar de ignorar por completo a tu profesor?

Maddie levantó la mano a mi lado. Aquí vamos. "¿Sí?" El Sr. Styles la miró fijamente.

"¿Cuál es su nombre?" Debería haber sabido que esto iba a ser su pregunta inicial.

"Mi nombre es Harry, pero todos ustedes me van a llamar Sr. Styles." Él sonrió. Hoyuelos, oh cielos.

"Oh," rió ella, haciendo que me encogiera en el asiento. Ella estaba en la secundaria, pensé que habrían cesado las risas por ahora.

"¡Tengo una pregunta!" Una chica de nuestra clase llamada Ámbar dijo.

"¿Cual? Por favor, que sea rápido." El Sr. Styles dió su mejor sonrisa, pero yo sabía que estaba un poco irritado. Dios, él es caliente.

"¿Está soltero?" Ámbar, junto a todas las chicas en nuestra clase excluyéndome a mí, rieron. Él se rió en voz baja, moviendo la cabeza.

"¿Qué tal si empezamos?" Cambió de tema.

Maddie dio un codazo a mi lado.

"¿Qué?" Susurré.

"Está soltero." Ella sonrió.

"¿Cómo lo sabes?" Yo pregunté.

"Uf, Charlie bebé, eres tan ingenua. Durante muchos años de experimentación he aprendido que si no lo estuvieran te lo dirían." Ella me dijo. Entrecerré los ojos hacia ella.

"Estás loca."

"Pero estoy en lo correcto." Ella se encogió de hombros.

"Estás planeando algo." Indiqué. Conociéndola, habían varios pensamientos sucios consumiendo su mente.

"Bueno," sacó un trozo de papel. "No sería el primer maestro al que me he tirado."