With My

Capítulo 5

3 años después
Narra____
-pero que molestia, ustedes me tienen harta!-grite y con mi espada los aniquile de una tajada-jum..idiotas-pronuncie dándole poca importancia al asunto, bueno e aquí de nuevo supongo que ya me conocen al igual que mi historia y...

-agh!...a-a-a-acaso e-e-eres tonta?-

-¿ahora que v-v-viejo?-pregunte con molestia y imitando su muy irritante tartamudeo, siempre es lo mismo

-n-n-no quería que l-los matarás, solo que l-los c-capturaras-dijo, diablos me tiene harta

-y precisamente ¿para que?, solo son simples demonios- dije sin darle importancia y rodando los ojos

-e-e-eran para una investigación es-s muy complicado el simple hecho de invocarlos-dijo con furia, yo solo rodee los ojos

-no entiendo porque me asignaron contigo-dije y me retire no estaba dispuesta a soportarlo

-¡¿a d-donde v-v-vas?!-grito detrás mío

-!adiós viejo!-grite con burla haciendo una señal con la mano

-ins-s-solente!-le escuche gritar, yo solo le ignore y seguí mi camino, hasta que me encontré con Credo, se veía molesto

-¿por qué no estás en tu puesto?-pregunto frío y serio,¿que le habrá pasado? solía ser más divertido

-¿con ese loco?-apunte hacia atrás dónde aún se escuchaban los gritos de Agnus-Ni hablar-resonge mientras Credo fruncia el seño francamente molesto
Mientras tanto en ciudad fortuna
Narra Nero
-¿aún sigues pensando en ella?-le pregunté sentándome a su lado

-no lo puedo evitar, desde hace 3 años que no la vemos, y además hoy es su cumpleaños-dijo y vi como levantaba una cajita azul con un moño blanco en el centro

-jum..estoy seguro que esta bien-dije despreocupado, Kyrie me miro curiosa

-como estas tan seguro?-

-tu y yo sabemos que ella siempre a sido fuerte nadie la derrota, al menos no con facilidad-dije, y ella sonrió

-si..pero me gustaría aunque sea verla, saber que esta bien y no le haya ocurrido nada malo-dijo cabizbaja, yo ya un poco molesto por la situación, tome su barbilla con cuidado de no lastimarla y le hice mirarme, sus ojos cafés se abrieron de golpe, mis ojos se enfocaron en sus delicados y pequeños labios, quería besarla, de verdad quería hacerlo, intente acercarme, pero ella volvió a bajar la mirada sonrojada-sabes que no podemos hacerlo-dijo en un susurro que si no estuviera tan cerca de ella no lo habría escuchado

-lo siento- dije, baje mi mano y me senté de una forma más cómoda, el silencio era un tanto incómodo, así que decidí salirme, y explorar un poco la ciudad, mire un poco una parte de la ciudad aún en restauración, mire mi brazo derecho ya vendado por suerte nadie lo a notado o no le a tomado mayor importancia
Flashback
-seguro que estas fresas frescas le encantarán a Credo-festejaba Kyrie cargando con una pequeña bolsa

-claro..supongo que tienes razón..-dije con una sonrisa de medio lado, sabía perfectamente que quizás las rechazaría como siempre

-pero que es eso?!-chillo Kyrie señalando frente a nosotros, yo dirigí la mirada hacia donde Kyrie señalaba encontrando unos extraños demonios, eran de pelo blanco con unas enormes garras parecidas de hielo, yo saque mi espada un poco preocupado estos eran de un nivel superior, yo corrí hacia ellos atacando a cada uno, pero eran bastante fuertes, de la nada empezaron a llegar más, cubriendo esa pequeña parte con una ráfaga de nieve, la vista se me dificultó, pero eso no evitó que atacará a lo que se me ponía en frente, hasta que..

-Ahh!!-un grito bastante conocido resonó en mis tímpanos

-Kyrie!!-grite desesperado buscándola entre la ráfaga, de pronto la ráfaga se detuvo, dejándome ver con claridad a mi alrededor, los edificios estaban ligeramente destruidos con demonios por encima de estos,había nieve por todos lados no había lugar en el que no encontrará ese dichoso material, vi hacia enfrente y vi a Kyrie rodeada por estos demonios, mis ojos se abrieron a tope, mientras mis nervios aumentaban, empuñe mi espada contra ellos pero estos la esquivaron con facilidad

-Kyrie corre!!-grite desesperado, intentando alejarla del peligro, yo empecé a desesperarme, ¿qué podía hacer?, vi como uno de los demonios tomó de su coleta a Kyrie obligándola a hacer su cabeza para atrás

-Kyrie, kyrie!!!-gritaba desesperado, no quería que le hicieran daño, pude sentir como algo me golpeaba empujandome lejos, golpeandome mi brazo derecho, yo lo toque sintiendo un punzante dolor, y vi como de este corría sangre, *mierda* pensé estaba roto, no podía darme el lujo de quejarme, pero no puedo usar mi espada sin mi brazo derecho

-Ahh!! Nero!!-escuche los gritos de dolor de Kyrie aún ese demonio jalaba fuertemente su coleta, yo intente pararme pero no podía, vi como varios demonios se acercaban a mi, con sus filosas y amenazadoras garras *¿acaso iba a morir así?* me preguntaba en mi mente, pero había algo que me inquietaba, no aún no podía morir, no mientras Kyrie este en peligro, no me importa si muero, lo único que pido es que Kyrie este bien...
*más poder..*
Que?
*necesito mas poder!!!*
Escuche un grito dentro de mi cabeza provocandome un horrible dolor, pude sentir un dolor punzante aún más fuerte que el anterior, podía ver con claridad como mi brazo cambiaba por completo era de un color rojizo combinado con café, en el centro una enorme línea color de un azul rey que parecía brillar por si mismo, y la parte de la palma también estaba cubierto por esa extraña "piedra" por así llamarlo, me levante no era consciente de mis movimientos, mire en dirección a Kyrie estaba inconsciente, mientras los mismos demonios seguían rodeandola eso me enfureció
****
No se cuanto tiempo me tomo, no más de 20 minutos derrotar a cada uno cubrí mi brazo como pude mientras llevaba en brazos a Kyrie, que seguía dormida.
El brazo dolía y sentía un ligero cosquilleo desde la punta de los dedos, hasta el hombro, ¿que habrá sido aquella voz?
Fin del flashback
Seguí caminando viendo un poco a mi alrededor, hace mucho tiempo que no salía a ver la ciudad, habían varias personas con sus típicas capuchas, que no permitían ver su rostro, pero sin embargo sentí la mirada de algo, o mejor dicho alguien, voltee ligeramente la mirada logrando ver a una mujer, al igual que todos traía una capucha, su vestido era rojo, y pude ver como unos cuantos mechones rojizos sobresalían de la capucha, cuando se dio cuenta que la observaba, se giro de golpe y siguió su camino, esa mujer se me hacía bastante familiar, decidí no darle importancia y seguí caminando