Sus ojos, esos ojos que me vuelan la cabeza, aunque no tengan nada de especial para mi son los más hermosos, los que me hacen olvidar todo lo malo.
Y su sonrisa, esa sonrisa tan grande y blanca que me llena de felicidad. Pero esa sonrisa y esos ojos son los que no puedo tener, los que no me miran solamente a mi.
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El Diario De Una Depresiva
Short StoryTextos cortos, ideas expresadas (solo aptas para gente tan rota como yo)