Equilibrium

Parte 2

Y así es como todo lo dí sin darme cuenta, enseñé y me enseñaron. No digo ser un ser supremo, una enciclopedia, un erudito o un solucionario, ni siquiera tengo tanta edad, sólo unos 27 años bastaron para darle fin a todo eso, a destruirme por última vez.

Caminé mucho sin darme cuenta que era peligroso seguir una gran ruta a gran velocidad y parar sorpresivamente, pero lo hice.

Viví mi vida como una persona normal a mi edad, la distorsión y las fiestas eran lo mío, "live fast die young" frase cliché que representa muy bien mi vida, más de alguna vez me pregunté si lo que hacía estaba bien, pero al recibir mis calificaciones de la universidad todas mis dudas desaparecían, desde pequeño me inculcaron que mientras cumplía mis deberes en los estudios todo estaría bien, sin embargo, ese fue un gran error.

Y así fue, cuando Sábado 2 de Abril al llegar a mi departamento una llamada me desconcertó. Nadie llama hoy en día, debía ser importante, debía contestar.

Me precipité al teléfono y conteste ansioso, sin embargo nunca espere que la noticia detrás de esa quebrada voz fuera tan terrible.

Mi hermano había muerto.

No lo creía, tan solo ayer habíamos estado él y yo en una fiesta juntos. ¿Cómo era posible?

Nunca lo ví salir de allí, nadie supo, sólo desapareció esa noche, nadie lo notó, sin embargo, debido a mi estado lo dejé pasar, "Debió irse con una chica, suerte la suya", pero no fue así.

Después de que entregaron los resultados de la investigación, paré, me detuve, y la vida me pasó la cuenta, sin embargo, no podía seguir dañando a mi familia, menos con el por qué murió.

Uno de los del bando contrario, tú sabes, de esos que sólo quieren hacerte la vida imposible, ellos y sus amigos, al momento en el que se percataron de que era mi hermano el que estaba con una de las chicas que "les pertenecían", no hallaron mejor forma de prohibirselo que matándolo.

Joder, ¿fue mi culpa?, es obvio que fue mi culpa, no te molestes en contestarme.

Paré de tomarme hasta el agua del florero, de fumarme hasta los fósforos y de tragarme hasta vitaminas C, me dí cuenta de que estaba mal, sin embargo, el cambio que realicé no fue muy distinto, no bebía, no fumaba, ni me drogaba con ningún tipo de pastillas; no salía, no hablaba, empecé a estudiar por internet, perdí amigos, perdí a mi familia, a mi novia, perdí el sentido y rumbo de mi vida, creí que lo único que alguna vez tuve fue esa vida de distorción diaria, que nunca paraba.

Paré sorpresivamente después de vivir tan rápido, ¿sabías que así se producen los accidentes múltiples en las carreteras?, eso pasó en mi vida, chocó mi vida y todos sus aspectos contra mi ser, el primer auto, el que finalmente, aunque la ley diga lo contrario, causó el accidente.

Y así fue como pasé mis 3 años alimentándome de lo que me traía mi madre cuando ya sentía que pasaba mucho tiempo desde la última vez que ingerí algo y me moría de hambre.

Sentía que todo lo que tuviese a mi alrededor me podría llevar a mi vida anterior nuevamente, a matar a mi hermana pequeña o a mi esforzada madre. Sé que estuvo mal, no me mires así.

3 años después me digné a salir. No era el mismo, mi cabello era largo, durante todo ese tiempo me lo corté unas tres veces solamente, había adelgazado mucho, parecía mas alto, pero ni idea. Mi cara se veía demacrada, las ojeras decoraban mi rostro como cualquier cuadro lo haría en una casa, de una forma cómoda y común.

No fue una gran salida, fui con mi hermana y mi madre a buscar mi título, que por haberlo terminado por internet me demoré un año más de lo normal.

¿Y ahora qué?

Temía que alguien me reconociera, que despues de que pensaran que había estado muerto, iba a ser como si viesen a un zombie, pero bueh, era mejor que me vieran antes de que me fueran a buscar por el cementerio, ¿no?

Mi hermano era mi mejor amigo, siempre estuvo conmigo, era mi deber protegerlo, era mi hermano menor, gran parte de mi se había ido con el, y se me notaba.

De pronto pasó lo peor, mi mejor amigo, el que más de alguna vez trató de ir a verme en mi claustro, me reconoció.