Querían hablar, pero no pudieron; había lagrimas en sus ojos. Ambos estaban pálidos y delgados; pero aquellos rostros pálidos estaban iluminados con el amanecer de un nuevo futuro.
-Crimen y castigo de Fiódor Dostoyevski.
Crimen y castigo
Querían hablar, pero no pudieron; había lagrimas en sus ojos. Ambos estaban pálidos y delgados; pero aquellos rostros pálidos estaban iluminados con el amanecer de un nuevo futuro.
-Crimen y castigo de Fiódor Dostoyevski.