Game for two→j.b

Capítulo 2: La fiesta de bienvenida

Me miro una vez más en el espejo, pensado en lo mala que es está idea.

Estos jeans altos son tan malditamente ajustados que los siento como una segunda piel, mi regordete trasero parece que quiere salir por un poco de oxígeno en cualquier momento, estos zapatos del demonio que me ha dado Heather son como de malditos tres pisos en cualquier momento me voy a partir los tobillos.

Lo único que va con mi relajado estilo, es está hermosa camiseta que me llega justo donde termina el jeans dejando sólo un poco de piel fuera, es negra con algunos lugares transparente y en el centro unas letras doradas muy sutil con las palabras Hakuna Matata.

Mi cabello con unas ondas un poco alocadas, y mi maquillaje muy simple con un delineado y máscara para mis pestañas. Un labial un poco vino porque Heather dijo que se veía de infarto y podía llevar a cualquier chico a la cama, como si eso fuera lo que quisiera.

-¡Brooky! ¿ya terminaste? - Heather asomó su cabeza por la puerta del baño.

-Sí ya terminé, ahora ¿podrías por favor dejar de gritar como loca? Estas matando mis jodidos oídos - rodé los ojos porque así había pasado la mayoría de la noche.

Eran pasadas las 21:00 y teníamos casi dos jodidas horas preparándonos, esto es ridículo. Había terminado hace más de cuarenta y cinco minutos y Heather aún no salía del maldito baño, bufé molesta ya no lo soportaba.

-¡Maldición Heather! ¿PUEDES APURARTE? ¡Sino sales en dos malditos minutos juró que te voy a sacar con una patada por tú exagerado culo!- grité al borde de mi maldita paciencia.

-Jesús Brooke, cállate de una vez que mamá vendrá a callarnos y nos dejará encerradas toda la noche - Heather venía colocándose una argolla en su oído mientras que caminaba perfectamente por un lado de mí con sus más exagerado zapatos altos.

No podía negar, ella era excepcionalmente hermosa. Llegaba unos jeans un poco bajos que moldeaban a la maldita perfección su trasero,un body que mostraba piel en sus caderas y sus muy apretados pechos, juro que se le saldrán en cualquier momento. Y sus muy altos zapatos negros que hacían lucir sus piernas más largas. Me sentí más fea de lo normal.

-Sólo vamonos, ¿Olivia nos busca o vamos en tú auto? -pregunté sin saber que íbamos a hacer.

-Nosotras nos vamos en mí auto, y ella en el suyo porque llevará a su hermana para que se distraiga un poco, ya sabes los niños la agotan un poquito- me dedicó una mirada, yo sólo asentí.

La hermana de Olivia se llama Emily y es extremadamente genial, solo que no tomó buenas decisiones y dio a luz a temprana edad, sin embargo sus hijos son hermosos y tienen el cariño de todos.

Salimos y nos montamos en el hermoso  auto de mi prima, es un Audi R8 negro mate con algunas decoraciones en rojo, fue su regalo de cumpleaños y eso me hace preguntar porqué yo aun no tengo uno.

Salí de mis pensamientos justo en el momento en que nos estacionabamos frente a una mansión exuberante, y la cantidad de personas que salían y entraban deliberadamente de ella me hizo pensar cuantas fiesta hará al año este chico de nombre que desconozco.

-Trata de socializar un poco Brooke, por favor. Y no te amargues tanto, relájate y si ves a un chico lindo que quieras conocer, puedes avisarme- guiñó su ojo y solo le di una mala mirada.

-No soy una zorra Heather, y en cuanto me comience a aburrir me largo de aquí. Trata de no tomar mucho, tienes una bebida del carajo y tú trasero pesa como la mierda- dije para dar fin a la conversación, ella solo soltó una risotada.

Entrelazo nuestros brazos y entramos a la casa/mansión. La música invadió mis oídos y pude distinguir el ritmo de "Get low" mientras que el humo hacia mis ojos arder y estaba más que segura que eso no provenía de una máquina, la marihuana se sentía.

La gente estaban teniendo sexo con  ropa en la pista de baile, no me sorprendía en lo más mínimo, las personas de hoy en día siempre andan con las hormonas alborotadas. Un grito nos sorprendió a ambas mientras caminábamos.

-¡HOLA PEQUEÑA PERRA, POR FIN HAN LLEGADO!- Olivia casi me hace caer por su repentino abrazo, sonreí, la extrañaba.

-Hola Olivia, también me encanta verte ¿donde está Emily?- miré por encima de su cabeza.

-Oh, esta por allá hablando con un chico, sabes que necesita un poco de acción después de tanto tiempo.- frunci el ceño, no me gustaba esa idea.

-Oye amiga tranquila, ella tiene algo, como un tipo de aparato que no te deja salir embarazada.- ella se había dado cuenta que no me agradaba la idea, asentí.

-Dejen de hablar, estamos en una maldita fiesta. - Heather rodó sus ojos

-Es la verdad.- Olivia la apoyó -Ahora, ¡A Divertirnos!- dio pequeñas palmaditas

Olivia agarró mi brazo y del de Heather y nos adentró aún más a la escándalosa fiesta,  llevándonos a un grupo de personas que supongo que eran sus amigos.

-¡Chicos! Ella es Brooke la prima caliente de Heather, por favor no traten de meterse en sus pantalones y tratenla como una de nosotros.- concluyó Olivia y pude sentir los colores en mí rostro.

-Hola chicos, soy Brooke Hill.- agite un poco mi mano.

-Es un placer al fin conocerte, soy Stefany.- me dijo una morocha un poco baja, era muy linda.

-Soy Alex y tú eres muy hermosa.- dijo un chico bastante lindo, bajé mí mirada un poco sonrojada.

-¡Oh por favor Alex! No empieces con esa mierda, la ultima vez estuvo una chica linda con nosotros y tú lo arruinaste. - grito un chico un al lado de el.

-¡Hey! Nosotras somos chicas lindas idiota.- reclamó Stefany. Reí un poco, esta situación me divertía.

-Soy Daniel, y presiento que seremos muy buenos amigos.- abrazo mis hombros el mismo chico que le grito a Alex, me caía bien, era divertido.

-Suelta a la chica, que seguro estará pensando que somos un grupo de psicópatas. - habló otro chico que no lograba ver.

Salió detrás de Alex y Oh.por.el.jodido.dios, este hombre era hermoso, sus ojos eran un miel muy profundo y su rostro con  facciones muy definidas y duras. Su cuerpo se veía musculoso pero no tanto para asustar y pude ver sus brazos llenos de tatuajes, dios era hermoso.

-Mucho gusto, soy Justin. Justin Bieber y es un verdadero placer conocerte.-

Estoy en un maldito shock.