La Dama De Las Rosas

Prólogo

Era finales del XVI, donde los cuerpos de las mujeres eran moldeados por los corsets que apretaban sus cinturas al grado de no permitirles tomar el suficiente aire para respirar bien. Época del uso de espadas, cuchillas, dagas, mazos, etc. y las armas de fuego no existían. No había calles pavimentadas y los transportes eran por medio de carrozas y animales como los caballos, los burros, etc.

En ese entonces la gente creía en magia negra y artes oscuras, y para aquellos que fueran acusados como practicantes de estas actividades, debían ser torturados por medio de la práctica del "CASTIGO DIVINO". Este consistía en quitar, romper, poner, arrancar lo que sea, etc. prácticamente hacerle lo que sea a la víctima.

El castigo divino provocaba en sus víctimas el arrepentimiento de sus actos diabólicos y a su vez el deseo de su misma muerte. Y una vez que la víctima llegara a este grado, la única forma de poder limpiarse de todos sus pecados y ser santificado, era arrojándolo a un risco llamado "la purificación demoniaca", donde las luces quemarían sus carnes hasta penetrar su alma y así limpiarla y si el sol no los mataba por el calor, los carroñeros lo harían y decían que si la víctima no moría por el sol o la caída, sino por los carroñeros, era una señal de que Dios no la perdonaba y no la aceptaría en el cielo.

Ninguno de los torturados debía morir durante la práctica, pues era un sacrilegio matar a una persona, era lo mismo como si alguien fuera un practicante de magia oscura, así que si el torturado moría durante una tortura el verdugo tambien era castigado de la misma forma que su víctima.

Los sacerdotes de Bryggia eran los encargados de juzgar y decidir las castigos de las personas. Eran seguidores de Dios, y como tal su obligación era eliminar el mal del mundo de uno u otro modo.

Cada semana en Bryggia, se torturaba gente, muchas terminaban inválidas, sin alguna extremidad, estériles, y demás, por lo que a muchos, para evitar la vergüenza de que su familiar haya terminado en alguna de esas condiones, la familia mandaba a la calle a su cónyugue, hijo o hija, primo, hermano, lo que fuese, o los exciliaban de la ciudad.

Para aquellas familias que si valoraban a su ser querido y terminaba siendo torturado, se les prohibía rezarle, o hacer algo en su honor, pues era considerado como sacrilegio, pues era una muestra de que apoyaban a la víctima con todo y sus delitos, por lo tanto a la maldad, y si los atrapaban realizando tales actividades se les llegaba aplicar el "castigo divino".

Así era la vida en el reino de Bryggia, mas conocida como " El reino de las Brujas", debido a que todo hombre, mujer, niño, inclusive animales, eran enviados y purificados. Y era la ciudad principal en que se recibían personas y realizaban torturas.