La fiesta era increíblemente aburrida, repleta de estrellas de cine muy conocidas que eran amigos de la familia y unos cuantos que eran nuevos en el negocio, algunos acababan de llegar a Los Ángeles con el fin de triunfar en el mundo de la actuación como en el caso de Johnny... Supongo.
La verdad es que no tuve la oportunidad de hablar mucho con el que sería mi nueva co-estrella ya que estaba ocupada trasladándome de lado a lado para poder hablar con las personas que me llamaban para felicitarme por mi cumpleaños; fue algo eterno.
Miraba mi bebida con concentración mientras la gente que me rodeaba seguía hablando.
"Cumpleañera" Alguien me susurró en el oído de manera inesperada poniéndome los pelos de punta. Me volteé para ver de quién se trataba.
Era Leonardo, también era nuevo en la industria del cine. Por ahora no ha actuado en más de dos películas pero es un tipo prometedor. Leo es un par de años menor que yo pero eso no lo ha detenido; sigue mostrando su interés en mi sin disimulo.
Lo conocí por mi hermano, Leo ve a Robert como un mentor... Un mentor que también lo ayuda a colarse en las fiestas más prestigiosas de Hollywood.
"DiCaprio, que te dije?" Me sonrojé un poco pero traté de esconderlo y luego continúe con mi punto. "Distancia, niño"
"Solo eres un par de años mayor, no es para tanto" El sonrío justo cuando Leonardo iba a soltar otro comentario se formó una pelea capturando la atención de todos.
"Pelea! Pelea! Pelea!" Gritaban todos al unísono. Se me hacía difícil ver de quienes se trataba así que me acerqué. Mi intuición me decía que era muy probable que se tratara de mi hermano.
Y así fue; se trataba de mi hermano Robert así que me puse en el medio y traté de pararlos agarrando a Robert y tratado de calmarlo mientras Leo agarraba a Fox.
"Ahora que pasó?" Pregunté mientras miraba a mi hermano con seriedad.
"Fox miraba a mi novia" El gritó furioso "Estas muerto Fox, muerto!"
Michael solo río y se sobó la cara.
"Increíble" Suspiré y crucé mis brazos.
La fiesta nunca se trató de mi de todas formas, estaba aburrida y honestamente me cansaba el ambiente así que me dirigí a la salida.
Llegué a la parte de enfrente de la mansión de Burton donde se encontraban todos los autos lujosos de los invitados. Ni un solo alma, solo yo.
Encendí un cigarrillo y lo miré con atención.
"Eso mata, princesa" La voz provenía de atrás, sabía exactamente de quién se trataba.
"Johnny"
"Puedo preguntar por qué la princesa salió del palacio?" Tomó asiento al lado mío y me observó con atención esperando una respuesta.
"No es mi clase de fiesta" Dije cortante tratando de romper el contacto visual ya que me ponía nerviosa; en ese momento no sabía por qué me ponía así.
"¿Qué clase de fiestas van contigo?" El levantó la ceja.
"Algo que muchos de acá describirían como una fiesta de camioneros" Seguía observando mi cigarrillo.
"De camionero... Eh?" El continuó "Un bar, hamburguesas y música de Led Zeppelin sonando en el fondo?"
"Me leíste la mente" Apagué el cigarro y lo observé a él.
"Puedo hacer que eso pase." El me ofreció su mano para guiarme y yo la tomé. "Mi auto es el de allá, el único pedazo de chatarra que está estacionado por aquí"
Se me hizo inevitable no reírme de aquel comentario.
Perdón por demorarme tanto en subir otro capítulo, prometo que de ahora en adelante voy a estar más por acá. Voten/Comenten si quieren que siga. Gracias por leer!