A tu lado

Elizabeth Levin Pacciano

(1 año después) 2011

Todo paso prácticamente tan rápido como una estrella fugaz, no logre ver cuando venía hacia nosotros, no logre ver cuando todo se dio vuelta abajo, no logre ver nada, solo escuche el fuerte ruido que hasta noches como hoy me persiguen, retumban tan fuerte en mi cabeza que choca contra todas las paredes haciendo que grite de dolor, volviendo cada noche a ese momento.

Siento el frío correr por mis piernas, llevo la frazada hasta mi mentón y mi cabeza se aprieta contra el colchón, cierro los ojos con fuerza, como si de esa manera pudiera escapar, pero no, nada logra que se vaya

-Cariño -Escucho de fondo la voz suave pero adolorida de mi madre, su voz solo hace que grite más, y el dolor golpea con fuerza, lloro.- Ya bebe, ya -Llora conmigo- Jared trae la pastilla -ruega- traela por favor – solo escucho como su llanto se mezcla con la suplica y el dolor traspasa mi alma, o lo que quedaba de ella.

-Olivia -ruega el, algo que no logro entender, solo dejo de sentir la mano pequeña que acariciaba mi brazo y la reemplaza una mano mas grande que saca mi cabeza de la almohada.

Un paño caliente y mojado tapa mis ojos y por un leve momento tiemblo, recordando.

-Elizabeth -susurra- Beth, cariño

Lloriqueo un poco más, hasta que sin saber como, solo estoy en silencio.

Junio 2010

Podría decirte que todo es igual, que ya nadie te recuerda; pero mentiría, tal y como lo hice esa noche, mentiría, nos llevaste contigo, destruiste esta familia, Olivia ya no sonríe como lo hacia, Jared es un alma en pena por la casa, a mi me llevaste contigo, no puedo dormir, no puedo dejar que nadie me toque aparte de Jared y Olivia, soy solo un recuerdo de lo que era Elizabeth Levin Pacciano.

Agosto 2012

Hoy cumplí 16, debería estar en una fiesta, debería estar tomando como cualquier chica normal que cumple 16, debería estar preparándome para tener sexo ya sea con mi novio, o con algún chico lindo de mi fiesta; una fiesta que obviamente no existe, una fiesta que si existiera, estaría vacía, por que nadie se acerca a mi, más simpático aun, no hay posibilidad de que me acerque a alguien sin temblar, sin recordar, sin entrar en histeria y solo irme, si vuelve a suceder me encerraran, esta vez me encerraran de verdad.

Noviembre 2014

No se por que aun te escribo, pero Jessica, mi Psicóloga dice que es una manera de no dejarte ir, de seguir recordando que estas presente aunque ya no estés, que es una manera de hacerme creer que puedo hacerte sentir culpable, pero sea el lugar donde estés, sabemos que eso no es cierto, no te sentirías culpable ni aunque estuvieras aquí; Me recibí el año pasado, aun no se para donde despegar, no se que quiero hacer, pero si tuviera una opción querría volver a empezar en otro lugar, un lugar donde nadie te recordara mirando mi rostro, un lugar donde los susurros no sigan mis pasos, un lugar donde pudiera decidir por mi, por que aunque ya sea mayor de edad, no me dejan ni a sol ni a sombra, simplemente no me dejan sola, y es una tortura, una tortura que provocaste y te fuiste, me destruiste y me dejaste aquí, me dejaste con tus demonios y los mios.