Ser, Sentir & Escribir Como Piscis

Querido Papá:

Nunca te escribí una carta, supongo porque tenía presente que nunca te llegaría y bueno, ahora no podrías leer una siquiera, debido a que dejaste este mundo, ha pasado tiempo desde nos vimos la última vez y desde que volviste a alejarte de mí.

Desde que supe que eras mi papá (creo que fue cuando tenía 6 años)  mi sueño era encontrarte, saber quien eras, tener un lazo contigo, conocer a la otra parte de mi familia, tener un papá de verdad.

Ahora que lo pienso, por un lado me arrepiento de haber encontrado mi acta de nacimiento cuando tenía 6, supongo que en parte por  todo lo mal que me sentí por no tener un padre. Dicen que el padre se encarga de instarte a hacer las cosas, te enseñaba que no debías rendirte y lo mejor te enseñaba a ser  fuerte emocionalmente, a veces pienso que es así, digo mi mamá no me dió esa parte para enfrentar el día a día. Cada día del padre, cada unos de mis cumpleaños, y fechas familiares sentía un vacío, porque tú no estabas en mi vida, lo peor de todo es que no me gustaban hacer los regalos en el colegio para el día del padre, yo no tenía uno y dárselo a mi abuelo no tenía sentido, porque no fue un padre para mí. Me molestaba tener que esmerarme en un regalo que no iría para ti, y tampoco estaba en mi entendimiento el significado del concepto: Mamá y Papá a la vez.

Recuerdo que un día me enteré el día en tú cumplías años, desde que lo supe ese día tuvo otro significado para mí, me ponía irritable para no demostrar la tristeza que tenía, aunque era inevitable no acordarse de la fecha, ya que cumplías años un día antes que mi hermano.

Con el tiempo tu eras un tema para mí en el sentido que si alguien me preguntaba por ti, sin saber nada yo tenía que recordar la tristeza que tenía oculta, aunque hoy en día no me molesta responder de la siguiente forma cuando entras en conversación: Mi padre esta muerto, tan solo estuvo durante 2 años cuando pequeña y un par de días en mi adolescencia, tengo muy lindos recuerdos de él.

Todo lo que sé de ti, lo sé por un tío que trabaja en carabineros, sé que tengo 5 hermanos, que estuviste casado hasta tu último día, no con la persona que te acompaño en tu recta final, 6 hijos de 4 mujeres diferentes y a todos los abandonaste, ser padre no era lo tuyo, nunca lo intentaste con ningún hijo de tu sangre, te desligaste de cada uno de ellos, supongo porque no querías ser responsable de alguien más.

No te imaginas todo lo que sufrí y lloré cuando dejaste de hablarme, yo iba a cumplir 17 años y esperaba con ansias tu llamada, quería escuchar de tus labios aquellas palabras que nunca me dijiste, pero no fue así, los días pasaron y no recibí la llamada tan ansiada, ni tampoco una de disculpa, ni ninguna otra más. Con el tiempo lo único que yo pensaba que la culpa era mía porque a lo mejor te hice enojar o te exigí mucho desde el principio, nunca sabre realmente que paso, pero ya no es necesaria la respuesta porque aunque me costó entender lo que pasó, al final se que la culpa no fue mía, tu solo no quisiste hacerte cargo de mi, no querías tener otra responsabilidad. 

El tiempo y esta experiencia me hicieron crecer de una forma que nunca lo imaginé, pude darme cuenta que no todas las familias tienen un papá, y que las mamás pueden cumplir doble rol, que aunque no te tuve en mi vida, me alegro que las cosas pasaran como lo hicieron, porque soy una persona dulce, amable, comprensiva, empatica, emocionalmente fuerte, cariñosa y en realidad lo que soy es gracias a mi mamá que siempre estuvo ahí para consolarme aún cuando no entendiera lo que sentía no tenerte. También me enseñaste que odiar y sentir rencor te convierten en una persona mala y que la mejor forma de dejar salir todas esa malas emociones era pensar y reflexionar por mi misma y llorar si es que era necesario. 

A pesar de que el tiempo había pasado y me enteré de que ya no estabas en este mundo, aún así lloré, tenía tantas preguntas para ti y esperaba que en algún momento nos reencontráramos para hablar como adultos, aclarar las dudas de mi corazón y para hacerte saber que te perdonaba por todo y agradecerte por haberme dejado una pequeña parte de familia, un hermano amoroso y de buen corazón y unos sobrinos maravillosos que no tuviste la oportunidad de conocer. Lamento que justo en el momento en que supiste como ser padre (y de un niño que ni siquiera era tuyo) hayas tenido que partir, supe que ese niño lamentó demasiado haberte perdido.

Quiero que sepas que aún cuando tu no quisiste verme, si tan solo hubiera sabido el momento exacto, te hubiese hecho un par de visitas al hospital, no para recriminarte nada ni pelear, sino que para acompañarte en esa difícil etapa que estabas pasando, también me hubiese gustado asistir a tu funeral aunque no hubiese llorado, después de todo ya no me importaba el pasado.

Después de todo lo que pasó aún cuando te acordabas de mí, nunca pensaste que a pesar de todo yo llegaría a tu tumba, eso lo sé muy bien, pero ahí estaba con una amiga, en Maipú, en tu tumba, con un arreglos de flores para ti, supongo que estuviste ahí viendo sorprendido que era yo, después de tantos años sin vernos, volvimos a estar cerca. No te imaginas lo difícil que fue llegar la primera vez, pero lo logré.

Ha pasado tiempo desde la ultima vez que te fui a ver, desde que fui a reírme de ti, porque ya sabes a ti te encantaba hacer reír a la gente, al menos eso es lo que tu hermano me dijo, no lo hago con mala intención, sino para tu también me escuches y para que te rías de algo. 

Antes de terminar quiero agradecerte por todos las buenas cosas que herede de ti: mis ojos tornasoles, mi cara (dicen que soy igual a ti y me costó mucho aceptar mi cara por ya sabes por este tema que eras en el pasado), por mi sentido del humor y por amar reírme, bueno y por muchas otras cosas que compartimos.

Ay padre querido del alma, al final me has enseñado tanto aún cuando no estuviste en mi vida, me pregunto si las cosas hubiesen sido diferentes si tu hubieses estado en mi vida y aunque la idea de imaginarlo es tentadora, sé muy bien que perdería el tiempo, porque estoy segura de que no seria la persona que soy en estos momentos. Gracias también por eso.