Alejandro un estudiante promedio, de apariencia común, cabello castaño y largo, ojos cafes, tes blanca como la nieve, actitud egocéntrica, pero de un modo especial, no podía ver sufrir a nadie y trataba de ayudar aunque claro, su apariencia era poco alegre para querer alentar a alguien, con una mirada fría pero cálida al mismo tiempo, era algo bastante excéntrico en una persona, ya que te daba confianza y temor al mismo tiempo , era muy misterioso con su vida privada ya que no confiaba en mucha gente y solía hacer todo con su familia únicamente, Alejandro siempre sintió un gran orgullo de la cultura de su hermoso país, siempre buscaba la forma de saber mas acerca de su historia de teorías de como se vivía en el apogeo azteca o maya, pero algo lo llamo siempre mas al rumbo azteca, algo poco común que el notaba eran extrañas luces en el cielo el día de su cumpleaños, un día bastante supersticioso para algunos, estas luces parecían rondar por momentos y desaparecer.
Al comienzo de la primavera tuvo una extraña sensación , la cual lo hizo pensar en las ruinas de teotihuacan, así que como de costumbre le solicito a su padre lo llevara junto con su familia cosa que al padre fanático por igual de la época dorada de la cultura mexicana accedió gustoso, Alejandro no había ido ahí desde que era tan solo un bebe y al verla ahora quedo paralizado por la majestuosidad de las estructuras, sin embargo esta primavera no fue soleada y no pudo apreciar la serpiente de luz que desciende de la pirámide del sol, esto según antiguas creencias era una profecía de que algo terrible pasaría, pero hoy en día nadie le tomo importancia, sin embargo Alejandro sintió que algo andaba mal
Alejandro- Papá no crees que algo anda mal?
Padre- No, pero mira una danza ritual esta por comenzar en aquel montículoAl comenzar el ritual del año del conejo múltiples ofrendas yacían en el suelo, aromas únicos y sonidos extravagantes gobernaron el entorno, entre sonidos se dirigían a los cuatro puntos cardinales en tributo a Quetzalcoátl al finalizar Alejandro tomo un gran respiro y escucho un estruendo, parecía un trueno pero pese a que estaba nublado no había señales de lluvia o algún rayo, pero al cambiar la vista a sus espaldas pudo verlo, el gran Quetzalcoátl entre las nubes descendió ante el, al tratar de alertar a sus padres noto que el tiempo que había detenido, mientras tanto el dios Quetzalcoatl llamó a Alejandro
Quetzalcoatl- Joven mortal tu, eres el que debe salvar la tierra de la amenaza que surgirá de la ciudad de México.
Alejandro anonadado contestó con una voz entre cortante
Alejandro- y..yo? Pero si no tengo nada en especial, solo soy un simple mortal como has dicho
Quetzalcoatl con una voz burlona contesto
Quetzalcoatl- No eres el primero en portar este gran poder joven Alejandro, veras las leyendas que has escuchado hasta hoy sobre mi no son del todo ciertas, no sólo existo yo, hay 7 Dragones Celestiales, cada uno aporta un elemento vital para la vida en este planeta, nuestro poder debe heredarse de generación y ahora te corresponde responder al llamado
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El Ultimo Guerrero Azteca
Science FictionAlejandro un joven promedio estudiante de preparatoria en la ciudad de México es el ultimo descendiente directo viviente del dios Quetzalcoátl quien antaño otorgaba grandes habilidades a los guerreros aztecas, sin embargo tuvo un hijo con una madre...