The problem [Yoonmin]

En la madrugada [Jinkook]

POV Jungkook

Me había despertado a la madrugada con un problema de 'hombre', era la primera vez que me pasaba, a pesar de ya saber qué era. Bueno, no hay que ser muy inteligente para saber cuándo se te para y cuando no. Al fin y al cabo, todo era culpa de Namjoon por dejar ciertas cosas como porno en su computadora, y como buen maknae que soy, fui con la intención de apagar su computadora pero de alguna manera terminé por darle play a ese video por curiosidad y... Terminé viéndolo por completo.

Después de ver eso, me fui a dormir.

Ahora no estaba seguro de qué hacer, al principio pensé en ir al baño y tratar de solucionar ese 'problema' entre mi entrepierna. Para mi desgracia, no sé quién estaba en el baño y no podía esperar ni un segundo más, así que salí de la habitación, estaba Tae conmigo y no podía hacerlo ahí.

No sé por qué obedecí a mi cerebro ya no inocente e impulsivo, y como nene de mamá, fui con Jin hyung. ¿En qué estaba pensando? Ni yo lo sabía. Pero terminé yendo a su habitación.

-Hyung... Soy yo, Jungkookie.- Murmuré al entrar despacio, no podía moverme mucho, las luces estaban apagadas.

-¿Kookie? Qué paso pequeño... ¿Tuviste una pesadilla?.- Me sentí avergonzado, recordar que antes usaba esa excusa para venir a dormir con él, era ridículo. Ojalá ahora fuera una simple pesadilla.

Desde hace tiempo me gusta pasar tiempo con Jin hyung, me encanta todo de él; su altura, sus labios regordetes, sus ojos, su amabilidad, y aunque no me guste mucho su protección de mamá me parece tierno también. Jin me atrae y es algo que no puedo negar.

-Y-yo... Sí, tuve una pesadilla.- Mentí, ¿qué más iba a decir? "No, sólo vengo con hyung porque quiero que me ayudes con mi erección." No, no iba a decir eso.

Terminé por caminar despacio hacia la orilla de su cama, y como pude me acurruqué lo más distanciado de él, no quería que fuera tan evidente que estaba excitado. Tenía miedo de cómo reaccionaría ¿y si después me odia? Yo no quería eso, ni por suerte.

-¿Por qué estás tan lejos? Si estás enojado por lo del juego de hoy.. Perdón. Yo quería jugar Kookie, pero tuve que hacer otras cosas.- Murmuró cerca mi oído, y sentí como mi piel se erizo. Dios Jungkook, mantené la calma.

-¿E-eh?- Traté de sonar lo más normal posible, pero mi voz salió entrecortada. ¿Cuántos años tienes Jungkook para no poder controlar tu voz?

-¿Fue por eso?- Escuché su voz triste, y me sentí culpable. Claro que no era eso, no estaba enojado por no poder jugar con él. Es verdad que me hubiese gustado robarme un poco de su tiempo, que esté un poco para mí y no tanto con los demás. Pero entiendo que está ocupado.

-No, no estoy enojado hyung. Sólo que...- Cerré mi boca inmediato, casi que lo decía.

-¿Sólo qué?- Sentí su brazos pasar por mi cintura, y él me giró haciendo que quedáramos frente a frente. Los nervios se apoderaron de mí inmediatamente, sentí sus ojos sobre mi cuerpo y mi temperatura corporal subió.

-N-nada hyung.- Murmuré y una de sus manos pasó por mis mejillas. Si seguía así, me iba a morir.

-Estás caliente y tenés las mejillas rojas... ¿Tendrás fiebre? ¿Te sentís bien?- Me preguntó, y simplemente asentí con la cabeza. Hasta acá llegó mi límite, no podía aguantar más las ganas de tocarme. O me iba de la habitación de Jin, o le decía lo que me pasaba.

La primera opción hubiese sido la mejor para mí, pero si me iba así porque sí de su habitación él sospecharía y no me dejaría hasta que le dijera qué me pasaba. Así que no tuve más opción que decírselo.

-Hyung... No vine porque tuve una pesadilla. Yo... ¡Todo es culpa de Rapmon!- Terminé por decir y él soltó una pequeña risita. Su mano descendió por mi abdomen y sentí mi cuerpo arder por donde él había pasado su mano, no sé si era por lo excitado que estaba o porque era Jin quién me estaba tocando, pero se sentía jodidamente bien.

-Por esto ¿no?- Tocó con sus dedos esbeltos el bulto de mi bóxer y yo asentí avergonzado.

-Déja... Déjame explicarte hyung, Rapmon dejó su computadora encendida y quería apagarla, por eso... Sin querer, terminé viendo uno de esos videos pornos que él ve... Y bueno, lo demás ya lo debés deducir.- Traté de explicar.

-Esta bien, esta vez te voy a ayudar, pero la próxima nada de ver esos videos ¿si? Rapmon se las vará conmigo.- Rió por lo último, y su mirada se concentró en la mía como si estuviese esperando una respuesta antes de empezar a tocarme.

-Por favor Jin...- Susurré, y el frunció un poco su ceño, lo cual para mí se vio tierno pero obviamente no lo dije en voz alta.

-Querrás decir Jin 'hyung'.- Sonreí ante ese pequeño regaño, y su mano terminó por acariciar mi cabello.

-Sácate toda la ropa que tengas de tu cintura para abajo.- Ordenó, y yo asentí.

Me saqué mi pantalón de pijama, y de forma lenta y algo dolorosa saqué mi bóxer con dibujitos ridículos de conejos. Si hubiese sabido que terminaría con Jin hyung de esta manera no me hubiese puesto ese vergonzoso bóxer.

Él soltó una pequeña risa, y al ver mi erección se concentró en ella.

Empecé a perderme en el placer al sentir sus manos frías masajeando a un buen ritmo mi erección. Decir algo en ese momento se me hizo imposible, no podía controlar mi respiración que al pasar de unos minutos se había alterado aún más.

Se sentía tan bien, que si podría no correrme para que durara más la sensación, lo haría. Cerré mis ojos disfrutando lo más que podía, sus manos resbalaban más con el líquido pre seminal de mi erección pero aún así lo hacía de manera suave sin lastimarme. No duraría mucho tiempo más sin correrme.

-H-hyung... Me voy a correr, sa... tus manos...- No terminé la frase y me corrí en sus manos, la vergüenza me consumía ahora. ¿Qué le digo? Disculparme no es suficiente, con lo asqueroso que debe ser tener semen en las manos.

-¿Te sentís mejor?- Me preguntó, y se limpió las manos con unos pañuelos de su mesa de luz. Asentí, y traté de evitar su mirada pero una de sus manos ya limpia, levantó mi rotro y no pude evitar verlo. Cuando me di cuenta, estaba perdido en su hermosa mirada. Maldición hyung... No sabés lo qué me haces sentir, no sé vale, es injusto.

-Perdón hyung... No quería correrme en tus manos.- Tragué saliva y cerré los ojos esperando que me regañaran, pero en vez de eso, sentí unos suaves y cálidos labios sobre los míos así que terminé abiendo mis ojos sorprendidos ¡¿me había besado?!

-Shh~, no importa pequeño. Ahora a dormir que ya es tarde.- Como pude, me puse el bóxer que había tirado por ahí y abracé a Jin hyung.

-Te quiero hyung...- Murmuré y me acosté cerca de su pecho. Sentir sus latidos del corazón me tranquilizaba mucho.

-También te quiero pequeño, descansa bien.- Me rodeó con sus brazos y tardé unos minutos más hasta que me quede dormido.

En ese momento no sabía, que esa no sería la primera ni la última vez en la que terminaría con Jin hyung en la cama, y no sólo durmiendo.

(Mejor tarde que nunca, lo prometido es deuda. Jinkook al servicio(?) Espero que estén bien mis lectores! Nos vemos~)