Primer partido de fútbol...

56 2 0
                                    

Te había visto algunas veces en el colegio, siempre me habías parecido un chico guapo...

Tal vez por coincidencia del destino, cierta noche te ví cerca de mi casa, estabas con un pantalón negro y una camisa azul, te veías tan bien. Mis ojos se idiotizarón tanto, que hasta mi entuciasmo hizo que me levantara y patiara un balón con tanta fuerza para llamar tu atención, y así poder ver tu perfecta sonrisa a lo lejos, la verdad es que ni bola me parastes, solo cojiste tu mochila y te fuiste.

Cierto Domingo acompañé a mi hermano a su partido de fútbol, como todos los años lo hacía.
Pero de rrepente te ví hay parado con tu lindo uniforme gris, ahora podía entender la razón del por que habías estado serca de mi casa ese día.

Me senté, y en ese instante regresaste a poner tu mochila serca mío, Dios sentí claramente como mis mejillas se ruborizaban y agaché mi cabeza, tu pasaste sin darte cuenta de la expresión que habías causado con tu presencia serca a mi.
Empezastes a calentar, y empezé a mirarte. Luego empezó el partido, y esa fué la primera vez que te ví jugar fútbol, jugabas bien, tu cabello hacía juego perfecto con tu sonrisa. Mi mirada se pasmó en tí. (El número 80).

Ya hacía un buen tiempo que no me fijaba en alguien, es más pensaba que eso quedaría hay.

................

En el colegio habitualmente me enserraba en mi curso en hora de recreo. Siempre trabata de hacer cualquier cosa excepto salir del aula, era como un refugio para mí, odiaba salir y que todos me vieran, casi siempre permanecía lejos de la mayoría de mis compañeros.

Pero casualmente ese Lunes, ese bendito y primer Lunes, me asomé a la puerta de mi curso y ví hay sentado con 2 compañeros, riéndote cerca de la cancha cubierta, era sorprendete ver como mis ojos de entre toda esa multitud te había visto inmendiatamente a tí, sin previo aviso mis mejillas se ruborizaron y agaché la cabeza pensando que tú alzarías la mirada y me mirarías, como mis ojos te vieron a tí.

Asenté mi cabeza contra la mesa y en mi mente me decía:
- Es tan lindo, hasta el uniforme lo hace lucir espectacular.
Sin duda alguna me estaba fijando mucho en tí.

Al día siguiente, decidí salir con 2 compañeras al recreo. Estaba en hora de Inglés, y no estaba haciendo nada, mi cabeza solo pensaba en la hora de recreo, miraba a cada rato la hora, y refunfunaba entre mí, se me habían hecho las 2 horas más largas de mi vida, y hasta que fummmmm!!! Sonó la alarma, recuerdo claramente que fuí la primera en levantarme y salir al baño, todos mis compañeros se admirarón al ver que salía del curso, pero no me dijieron nada.

Salí del baño e intentaba arreglar un poco mi cabello, era sorprendente verme haciendo eso, pues normalmente casi nunca me lo arreglaba. Mis compañeras sin duda alguna estaban sorprendidas, pero no mencionaron ninguna palabra, nos sentamos cerca de la cancha de indor, y mis ojos no dejaban de buscarlo. Miraba a todas partes, buscándolo, habían chicos de todos los cursos pero él no, él no aparecía por ningún lado.

Lo busqué hasta cansarme ,hasta darme por vencida, agaché la cabeza, mis ganas de estar en el "RECREO" se habían desvanecido. Repentinamente oí una risa singular, se me asia conocida, tal vez fué un instinto pero mis ojos no dudaron en seguir ese peculiar y meolodioso sonido y cuando mis ojos al fin lo vierón, hay jugando indor, de todos los lugares que había visto, no me había fijado en la chancha de a lado, estaba a unos pocos metros de él, y rápidamente mis mejillas se pusieron coloradas.

Era más que ovio que yo había salido al recreo por ver a alguien, así que mis compañeras no resistierón más y empezaron a cuestionarme, la verdad es que no pude contenerme y les conté todo, era un alivio total, al fin sabían 2 personas.

Le pusimos un apodo poco usual: "El platónico", ya no creía que iva a pasar nunca nada con él.  No podía creer que había contado mi secreto, no tan secreto, a 2 personas con las que casi ni había tratado. En fin, las tres mirábamos como él jugaba, como su sudor caía sobre sus mejillas, él era simplemente perfecto.

Y poco a poco lo comenzé a observar más y más. Se me volvió como una rutina o una costumbre rara. Adoraba tanto verlo, que hasta empezé a averigüar cosas de su vida, sus amistades, sus gustos, y todo lo que tenga que ver con él, por medio de diferentes personas.


Nota:
Es mi primer capítulo, espero que les guste está historia. Esta basado en mi vida amorsa. Lo sé, soy un asco en cosas de amor, espero que ansien el segundo capítulo.

NO SABRÍA DESCRIBIRTE. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora