Capitulo 3

4 0 0
                                    


En cuanto menos me di cuenta ya estábamos en mi departamento, él se bajó y abrió la puerta del auto así yo bajara. En ese momento me sentía verdaderamente atónica, este chico era especial pero no quería dejarme engañar, pues Anahí otra residente que ya había tenido a cargo residentes de primer año me comentó que ellos trataban de hacerse tus amigos, de compartir contigo, no quiero decir que yo vaya a agrandarme por mi experiencia en quirófanos, para nada pero no quiero que me use para que apruebe y quede bien con Pablo Ricartti, quiero que quede bien por él mismo, por sus conocimientos, quiero que muestre que es capaz, así como yo también lo hice. Fue muy difícil empezar a mi me humillaron y maltrataron, recuerdo en mi primer año cuando ingrese al hospital yo me sentía verdaderamente inútil, pues solo recibía regaños tras regaños hasta llegue a pensar será que me equivoqué de carrera, hasta que llegué aquí, todo sirvió pero no tengo que decir algo, los médicos somos explotados, verdaderamente explotados, nos tienen horas y horas en guardias, estamos desvelados, cansados y aun así debemos operar y todo debe de salir bien, esto no es para cualquiera.

Luego de que me Llevó Rafael lo invité a desayunar, pusimos a hacer el caffé y bajamos ambos rápidamente a comprar unas facturas en la panificadora de abajo, a todo esto la gente pensaba que era mi novio, pues me di cuenta al día siguiente, me desperté, me di un buen baño y baje a comprar frutas, quería desayunar sanamente y cuando fui a comprar una mujer baja delgada de cabellos ondulados me dijo Señora hoy vi a su novio por acá y yo me asombré y dije que novio? Y ella de prisa contestó el doctor que vino fue a comprar con usted en la panificadora de mi hermana yo estaba en la caja agregó. Yo no dije nada, la verdad es que no me gustaba hablar de mi vida privada con nadie, compré un par de frutas y verduras así almorzar sano y poder ir al hospital. En camino a casa todo me carcomía y no sabía el porqué pues no debía importarme lo que haga Beiso fuera del hospital pero en mi cabeza rondaba la pregunta ¿qué hacía por esto lados?

Luego se pasaron muy rápido las horas, almorcé tranquila y tocaron el timbre de mi departamento, al abrir me llevé una sorpresa era Rafael con ensalada de frutas y me dijo que te parece si las comemos en el camino. No esperaba que fuera por mi, pero era un buen gesto de su parte, al fin y al cabo era bueno compartir con él debido a que hablábamos de pacientes, enfermedades, tratamientos, me comentó que tiene un primo con un esclerosis múltiple, que sus abuelos y tíos se negaban a acepta y eso es lo peor que un padre o familiar puede hacer porque al estar en ese proceso de negación no hace un tratamiento la persona que padece de cierta enfermedad por lo que esta avanza de manera brusca y no es bueno. Ya llegando al hospital Rafael me tendió una mano y me dijo gracias por ser buena y entender mis miedos doctora, yo respondí soy tu superior voy a comprender porque también pasé esto y no me gustaba la manera en la que me trataban, ten por seguro que jamás te trataré mal, solo ante cualquier duda consúltame, investiga no te quedes las enfermedades avanzas, cada día hay un caso nuevo y vos debes avanzar con ellas y buscar la cura así tus pacientes salgan, da tu vida por ellos, luego de la plática bajamos del auto y entramos juntos al hospital y todas las miradas se posaban en nosotros.

MI EX EL TESTIGO DE MI BODA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora