Capitulo 3

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El hombre me paró a la subida de las escaleras, cuando yo tenía la intención de ir a la habitación donde me hospedaba.
-Parate, ¿que haces con un trozo de pan?-Me preguntó el hombre- En esta casa no se puede llevar la comida a todos los lados, se mancha el suelo y luego Gladys(la limpiadora) lo tiene que limpiar, cuando quieras comer bajas a la cocina y comer los manjares que quieras.
-Sí, señor- le dije
-Quita, que te dejo el pan abajo, pero no lo vuelva a hacer-Con tono de amabilidad, me quitó el trozo de pan de las manos y mientras me lo quitaba puso un gesto en el rostro de asco- Deberías ducharte y cambiarte de ropa.
Cuando dijo eso me llevo a una habitación en la que había una especie de asiento blanco y un sillón en el que te podías sentar y te caía agua. Pero, ¿ que era eso de ducharme? No sabía que era eso y de que se trataba la ducha.
Al entrar al sofá había un palanca que al darle salía agua ¿Magia? Me duche y olía mucho mejor que antes. En el asiento blanco había una nota en la que ponía"Esta ropa es para ti, póntelo y sal afuera"Me puse esa ropa y salí a el pasillo y vial hombre esperándole
-Que bien hueles ahora, quieres ver a mi hija ¿no?-me dijo.
En ese momento me emocione al saber que podría ver a su hija
-Entra-mientras abría la puerta
Entre y el hombre cerró la puerta, me quede sola con esa niña, me acerque y la ví, la cogí en mis brazos mientras la cantaba la cancion que mi madre me cantó antes de que tirara, cuando estaba en la primera estrofa de la canción mis manos se resbalan de la niña, cada vez se me caía más y cada vez estaría mas próxima al suelo hasta que se me cayó al suelo y su cabeza impacto contra el suelo haciendo que la niña empezara a llorar y yo empezara a pensar que hacer

Al Lado De La Estrella PolarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora