NO LIMITS (Nash Grier)

Capítulo 5: Una pizza en el bosque

Nash estaba en el jardín, el cual se miraba desde mi ventana, también estaba Kim y Jack. No lo podía creer, se miraban tan perfectos ahí, sosteniendo una caja de pizza y una canasta; todos con la pijama puesta. En ese momento me sentí muy feliz, verlos sonreír mientras yo los miraba con sorpresa.

-¿Te vas a quedar ahí o bajarás? - Dijo Kim sosteniendo la canasta y con una sábana sobre sus hombros.
Sonreí y comenzé a bajar por los barandales debajo de mi ventana, me sostuve de las ramas de un árbol y me colgué hasta colocar mis pies en una banca del jardín.
-¿Qué es todo esto?- Pregunté mientras sacudía el pantalón de mi pijama.

-Pensamos que sería bueno comenzar una tradición.- Comenzó Nash, que se miraba perfecto con la poca luz que había.- Simplemente porque sí.

-Todos los días de luna llena.- Continuó Jack.

-Vamos al bosque a comer pizza.- Finalizó Kim.

-¿Pizza? ¿Bosque? ¿Luna? Se oye perfecto, imagino que la razón por la que vengan aquí es a causa de mi jardín trasero.

-¿En serio por eso estamos aquí?.- Preguntó Nash.

-Atrás del jardín de Emma, hay un pequeño prado, pero si te vas por la derecha llegamos al bosque.

-¿Vamos ya?- Pregunté metiendo las manos en mis bolsillos.- Espero que mis padres no entren a mi habitación, me matarían.

-Vamos.

Comenzamos a caminar y abrimos una puerta de madera de la valla del jardín trasero, que por suerte no sonó al enpujarla; Jack y Kim encendieron sus linternas. Caminabamos mientras hablabamos de la película, la escuela y otras cosas. Luego de pasar por el pequeño prado caminamos hasta llegar a un lugar donde los altos árboles agitaban sus ramas, ya estabamos en el bosque. Llegamos a un lugar que reconocí casi al instante, era un pequeños espacio entre los árboles donde habían unos troncos tirados y restos de cenizas de una fogata. Ese era el lugar donde Kim y yo solíamos venir cada año en vacaciones, aunque veníamos por las tardes.
Nash y Jack colocaron todo lo necesario para hacer una fogata, nos sentamos en los troncos y abrimos la caja de pizza para comenzar a comer.

-¿Quién empieza con las historias de miedo?- Preguntó Nash, que se había sentado a la par mia.

Comenzamos a contar las historias, en lo personal no me suelen dar mucho miedo porque me fascinan las películas de terror, el tiempo pasó y decidimos dormir hasta que amaneciera.
Kim me prestó una de sus bolsas de dormir porque yo no había llevado la mia. Todos nos acomodamos bien y dormimos.

~~
Oí algunas hojas y ramas crujir. Poco a poco abrí los ojos, ya había amanecido. No había nadie, me habían dejado sola.

—Emma, Emma - susurraban, una voz poco conocida. Era Nash, detrás de un árbol, me estaba llamando. - Emma ven acá.
Me levanté y todo comenzó a dar vueltas, caminé hacia Nash y ya no estaba mareada. Tomó mi mano y comenzamos a caminar, no había nada de frío, todo era perfecto, paramos detrás de un árbol.

— Mira.- me dijo señando a Kim y Jack, que estaban sentados en una roca conversando.
— Siempre supe que se querían. - dije bromeando. Nash volteó a verme, nos quedamos mirando a los ojos unos segundos, él se acercó a mi y oí unas risas.

Desperté por el frío que corría en mi rostro el cual estaba siendo empapado, una botella derramaba agua helada sobre mi, me levanté de un brinco, intenté dar un paso, tropecé y caí.